Bancos y fondos de jubilacion europeos provocan acaparamiento de tierras en Uganda
Según un nuevo estudio, bancos y los fondos de jubilación europeos están financiando a la gigante de palma aceitera Wilmar International, que está implicada en el acaparamiento de tierras en Uganda.
Bancos alemanes, británicos, franceses y holandeses entregan más de mil millones de euros de ayuda financiera a Wilmar.
Además, instituciones financieras europeas y estadounidenses poseen acciones en la empresa por 621 millones de euros.
Wilmar International es una de las mayores propietarias y refinadoras de plantaciones de palma aceitera en el mundo. La revista Newsweek la clasificó como la peor empresa en 2011 y 2012 por su historial de daño al medio ambiente.[2]
Un nuevo estudio realizado por Amigos de la Tierra Internacional vincula a las empresas subsidiarias de Wilmar International en la isla de Kalangala, Uganda con el acaparamiento de tierras y la infracción de las leyes nacionales y de la legislación sobre el medio ambiente.
Las comunidades de Kalangala, que viven y trabajan en la tierra que ha sido adquirida por las plantaciones de palma aceitera, han sido desplazadas, a menudo sin recibir ningún tipo de compensación ni opciones alternativas para su sustento.
Se destruyeron alrededor de 3.600 hectáreas de bosque, lo que afecta negativamente al medio ambiente y al sustento de la población local.
Las comunidades también se quejan de la creciente inseguridad alimentaria en la isla, debido a que grandes áreas, que anteriormente eran destinadas al cultivo de alimentos para el consumo local, se convirtieron en plantaciones de palma.
La coordinadora del programa Soberanía Alimentaria de Amigos de la Tierra Internacional, Kirtana Chandrasekaran, afirmó:
“Los bancos y los fondos de jubilación europeos están fomentando el acaparamiento de tierras, que destruye a miles de comunidades en todo el mundo. El sector financiero debe asumir la responsabilidad de sus actividades y garantizar que sus inversiones respeten los derechos humanos y cumplan con las normas medioambientales locales”.
En Nigeria e Indonesia, Wilmar está siendo investigada por un órgano de certificación, la Mesa Redonda sobre el Aceite de Palma Sostenible, por provocar deforestación y violar los derechos de las comunidades.
Los principales financiadores de Wilmar International en Europa son HSBC (877 millones de euros), BNP Paribas (241 millones de euros), Deutsche Bank (24 millones de euros) y Rabobank (222 millones de euros), además de los fondos de jubilación alemanes ABP y Pensioenfonds Zorg en Welzijn, que poseen acciones en Wilmar.
El Gobierno de Uganda y el Fondo Internacional de Desarrollo Agrícola, un organismo de las Naciones Unidas, también apoyan el proyecto de palma aceitera de Wilmar en Uganda, pero no han evaluado en forma adecuada las consecuencias negativas para la población local.
David Kureeba, de Amigos de la Tierra Uganda afirmó: “El gobierno es responsable de proteger a sus ciudadanos y debe dejar de facilitar la expropiación de tierra para inversores”.
Los inversores también tienen que presionar a Wilmar para que mejore sus prácticas o invierta su dinero en otra parte. Wilmar y sus empresas subsidiarias, con el financiamiento de la Unión Europea, están expulsando a las comunidades de sus tierras en Uganda.
Amigos de la Tierra Internacional solicita a los financiadores de Wilmar que presionen a la empresa para que mejore sus prácticas, o retire sus inversiones. Los bancos y los fondos de jubilación europeos no deberían contribuir a los conflictos de tierra con las comunidades locales ni a la forestación, ni deberían financiar a empresas que no respetan las leyes nacionales.
Amigos de la Tierra exhorta a Wilmar y al Gobierno de Uganda a que detenga el acaparamiento de tierras, devuelva la tierra que expropió a las comunidades y garantice que cualquier proyecto futuro cumpla con las leyes nacionales y con el requisito de consentimiento libre, previo e informado de las comunidades afectadas.
El Gobierno de Uganda debería respetar la Ley de Tierras de Uganda y no permitir la adquisición de tierras por expropiación para realizar inversiones.
PARA MÁS INFORMACIÓN EN INGLÉS CONTACTAR A:
David Kureeba, Amigos de la Tierra Uganda
Tel: +256-775-349-283, email: moc.oohay@dmabeeruk
Kirtana Chandrasekaran, coordinadora del programa Soberanía Alimentaria de Amigos de la Tierra Internacional
Tel: +44 79 619 86956, email: ku.oc.eof@narakesardnahc.anatrik
NOTAS:
[1] Los siguientes materiales están disponibles en Inglés:
El informe 'Financing of Wilmar International' (mayo de 2013) está disponible: aquí
Una ficha informativa sobre Wilmar está disponible: aquí
Una ficha informativa sobre el acaparamiento de tierras en Kalangala, Uganda está disponible: aquí
Las fotografías y testimonios en video de las comunidades de Uganda están disponibles en: aquí
[2] En 2011 y 2012, la revista Newsweek calificó a Wilmar como la peor empresa del mundo por su desempeño ambiental, de 500 empresas del mundo que cotizan en la bolsa. Ver aquí
El aceite de palma es a menudo utilizado para producir agrocombustibles. Esto ha tenido un efecto negativo en el uso de la tierra, en los alimentos y los bosques. Los países europeos han fijado metas y subvenciones de utilización de agrocombustibles para cumplir con los objetivos de energía renovable de la Unión Europea, pero dichas metas han provocado una expansión de las plantaciones en el extranjero. La legislación sobre agrocombustibles se está debatiendo actualmente en el Parlamento Europeo y en el Consejo de Europa. Amigos de la Tierra Europa está exhortando a la UE a que ponga un límite y reduzca a cero dichos combustibles, además de introducir un registro del carbono emitido para evitar la venta en Europa de combustibles que contienen altos niveles de carbono, como el biodiesel producido a partir de aceite de palma.
Fuente: Amigos de la Tierra