Argentina: carta del Frente de Lucha Mapuche y Campesino al periodista Eduardo Aliverti
"... Decimos No al Trafipán 2000. No a las represas en Corcovado. Pero estos No, albergan los muchos Sí con que nuestro pueblo defiende la vida, la relación circular y armónica con la naturaleza, la autoafirmación de nuestra identidad, el derecho al territorio y la reconstrucción de nuestra cultura"
A PROPÓSITO DEL CONFLICTO DE REPRESAS EN EL RÍO CORCOVADO, Y EL RECLAMO DE RESTITUCIÓN DE LA VERANADA COMUNITARIA Y OPOSICIÓN AL TRAFIPÁN 2000 EN LA LOCALIDAD DE RÍO PERCEY.
Reciba nuestros cordiales saludos desde las comunidades mapuches y campesinas que conforman nuestro Frente de Lucha. Hemos escuchado con mucha atención el desarrollo del programa que se trasmitió en el estudio de Radio Nacional de Esquel el pasado 19 de mayo, en el que pudimos comprobar una vez más, a lo largo de nuestra historia, cómo se deslegitiman nuestros reclamos, y cómo todas las voces del oficialismo están ocupando lugares estratégicos en la comunicación, confunden, mienten y esconden, irrefutables verdades, tal cual les manifestó el señor Luis Levilao, cuya ambigüedad periodística, favorece a los gobiernos locales de turno. Refiriéndose al conflicto Paillacan-Tinelli, "hay verdades a medias", dijo.
Las mentiras son construidas y sostenidas desde el poder. Es por eso que deseamos aclarar de qué se trata este conflicto, quiénes son los protagonistas, y cómo se siembran dudas, en donde sólo hay certezas, y cómo afirman mentiras disfrazando las verdades.
PRIMERO. La comunidad Paillacán se asienta en lo que hoy se conoce como Río Percey hacia finales de 1800. Una vez intalados allí, comienzan a refugiar a otras familias mapuches perseguidas durante el genocidio por parte del Estado Argentino sobre nuestro pueblo. Llegan pidiendo lugar en el lof, los Trafipán, Millacán y otros. Pero también llegan criollos, tales como las familias Fonseca, Díaz, Cifuentes, todos ellos reciben la hospitalidad de los Paillacán, quienes les permiten ocupar las tierras. Con el correr del tiempo la población se multiplica y la comunidad define un perfil campesino, desdibujándose su identidad. Sin embargo, a pesar de la pérdida de su cultura, la raíz y la memoria histórica de quiénes son, y de dónde descienden, no se ha perdido. Desde allí se paran como mapuches, a exigir la restitución de sus tierras. ¿Puede alguien negar su derecho a la autoafirmación de su identidad y por ende, sus derechos ancestrales sobre las tierras? Tierra que hoy está en manos de un funcionario alemán, Gunter Bessold con 2500 hectáreas, y del empresario argentino Marcelo Tinelli, con otras 2500 hectáreas.
SEGUNDO. Estas tierras que reclaman los Paillacán son veranadas de uso colectivo. Allí pastorean los animales. Cuando el historiador local Jorge Oriola, asegura que nunca hubo acceso a estas tierras, muestra un total desconocimiento de la historia de este lugar. Siempre usaron estas tierras, no sólo en el acopio de la leña, sino también en el pasaje de los animales, ya que es imprescindible rotar y dejar descansar la tierra para no agotarla. Esto también es sabiduría de nuestro pueblo.
TERCERO. Cuando Levilao asegura, casi desdeñando el reclamo, que allí nunca vivió nadie, es una obviedad, ya que son tierras altas, y permanecen gran parte del año cubiertas de nieve. La comunidad no las reclama para hacer viviendas sino para pasar animales. Es una forma de estar en armonía con la mapu. Si no hay tierras para cultivo y para el ciclo rotativo, las tierras bajas, en donde la comunidad tiene su vivienda y animales, se agotan, se empobrecen. Lo que se traduce como un lento exterminio social, económico y cultural tal cual se ve, hoy en día, en Río Percey, donde la población tan amontonada parece más un barrio marginal, que una comunidad rural, sin perspectivas de futuro para los jóvenes.
CUARTO. En cuanto al Trafipán 2000, el pretendido mega proyecto turístico, está plagado de interrogantes que el Gobierno prefiere ocultar. Si es verdad que el señor Marcelo Tinelli no tiene participación directa o indirecta en el mencionado proyecto, en el caso de llevarse adelante, ¿a qué arreglo llegarán con el empresario?, ya que se vería afectado por ser habitante de la superficie afectada. Él es el único privilegiado con título de propiedad, mientras que la comunidad espera, gobierno tras gobierno, que algún funcionario tras más de un siglo de asentamiento, les reconozca sus tierras y les entreguen título de propiedad. Él, como poseedor puede oponerse jurídicamente al proyecto, su campo sería el acceso necesario para llegar al Centro de Esquí, los fiscaleros, a la hora de hacer valer sus derechos, quedan desprotegidos.
QUINTO. Si en verdad ya el proyecto no existe, solo anida en la imaginación y en los miedos de un puñado de pobladores, ¿por qué el Estado Nacional y Provincial rápidamente se organizan tras la denuncia pública del problema, invadiendo la comunidad con el desarrollo económico basado en el turismo? Una comunidad históricamente agrícola y ganadera es incentivada al nuevo espejito de colores, "el turismo". Los jóvenes de la comunidad en la escuela reciben capacitación, becados previamente, para convertirse en futuros guías de turismo, las mujeres son incentivadas para fabricar dulces y más productos de futura venta al turismo. Todos los organismos del Estado están articulados para generar disolusión del conflicto, con cómplices necesarios, como el Programa Social Agropecuario, el INTA, la Municipalidad, Turismo y otros, persuadiendo a la comunidad y fragmentándola.
Por supuesto, los medios de comunicación locales han cumplido una función cómplice con el poder. Jamás han entrevistado a los protagonistas. Sólo se escuchan las voces oficiales. Nunca han hecho una investigación sobre el tema con testimonios de la gente involucrada. Es censura y proscripción solapada hacia algunos luchadores mapuches de nuestra organización. Tampoco se ha informado sobre el impacto social, ambiental, económico y cultural que traería un proyecto como éste. Lamentablemente, Radio Nacional Esquel es el único medio radial que se escucha en la zona, reproduciendo una mirada hegemónica de los acontecimientos. Hay mucha más información que desearíamos proporcionar, sin embargo esta carta sería extensísima.
El otro tema que nos preocupa e indigna, de cómo fue tratado en su programa, es el conflicto de represas en la localidad de Corcovado, ya que seremos los damnificados directos por el proyecto. Hemos caminado la zona por donde se hará La Elena, la primera de las seis represas, que aunque el Gobierno lo niegue pretenden hacerlas. ¿De dónde sacó Levilao la mentira que es una zona árida y pedregoza? Es obvio que no ha estado jamás en el lugar, que repite los dichos al intendente de Corcovado, principal interesado en que el proyecto se haga. Afortunadamente, contamos con varios informes elaborados por distintos sectores que acompañan nuestra activa defensa del río, entre ellos, académicos de la Universidad del Comahue, quienes sí visitaron junto a nosotros el lugar afectado, también se ha elaborado un artículo en la revista "Energía que destruye", de la Coalición Ríos Vivos, Programa Argentina Sustentable y Cono Sur Sustentable, y un informe especial especial sobre el tema de la organización Amigos de la Tierra Argentina. Ponemos a su disposición este material como los contactos que crea conveniente para nutrirse de información.
Finalmente lamentamos, que su programa haya contribuido a seguir reproduciendo las voces oficiales, y que la producción de su programa no se haya esforzado en sentar frente al micrófono a los verdaderos protagonistas de las luchas de los conflictos que hoy se están dando en esta Patagonia ya casi rematada, asumiendo como interlocutores a estos varios verdaderos camaleones de la comunicación, ayer menemistas y hoy devenidos a kirchneristas. No se engañe. La libertad de espresión en los medios locales no existe. Los que luchamos lo sabemos bien. Un periodista que desconoce un tema y opina de él, es un irresponsable. Invisibilizar nuestra existencia, nuestra cultura, nuestros derechos y nuestra lucha, ha sido siempre política de Estado, en una Argentina enteramente eurocentrista. Llevamos casi 200 años contra este Estado racista y opresor. Todos sus artilugios comunicacionales no les servirá para ocultar la esperanzadora insurgente rebeldía del pueblo, el heroico pueblo mapuche, que no solo es palabra, es acción, dignidad, memoria, dolor, valor y vida.
Por eso decimos No al Trafipán 2000. No a las represas en Corcovado. Pero estos No, albergan los muchos Sí con que nuestro pueblo defiende la vida, la relación circular y armónica con la naturaleza, la autoafirmación de nuestra identidad, el derecho al territorio y la reconstrucción de nuestra cultura.
Desde la Cordillera Sur.
Por Territorio, Justicia y Libertad.
¡Marici Weu!
Por cada uno que caiga, diez se levantarán.
ra.moc.oohay@onisepmacyehcupametnerf
Fuente: Amigos de la Tierra
15 63 73 06 73 / 47 73 59 47
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