OGMs: comercio entre América Latina y Sudáfrica, boletín N° 104 de la Red por una América Latina Libre de Transgénicos

BOLETIN 104 - RED POR UNA AMERICA LATINA LIBRE DE TRANSGENICOS

Los artículos que se presentan a continuación, lo demuestran.

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COMERCIO ENTRE AMERICA LATINA Y SUD AFRICA
Mariam Mayet - African Centre for Biosafety

África del Sur ha sido escogido por las empresas transnacionales de la biotecnología, como un país clave para poner en marcha su plan geopolítico para impulsar el comercio de organismos genéticamente modificados (OGM) entre los países del Sur.

Su legislación laxa, su proceso de autorización de nuevos OGM poco transparente y una infraestructura bien desarrollada, hace que este país sea un objetivo irresistible para la industria de la ingeniería genética.

África del Sur importa bastas cantidades de semillas transgénicas y granos (commodities) de Argentina, Chile y Uruguay para ser usadas en su mercado doméstico como alimento y pienso.

Por otra parte, África del Sur exporta grandes cantidades de semillas transgénicas al Sud Este de Asia, América Latina y otros países de África. Entre los países a los que exporta semillas, está Colombia, con quien comercializa semillas de algodón y maíz GM, para ser usados en campos abiertos.

EL PAPEL DE ÁFRICA DEL SUR EN LA PROLIFERACION GLOBAL DE OGMs

Si se hace un examen de las inmensas cantidades de permisos de importación y exportación que ha otorgado el Gobierno de África del Sur en los últimos años, se podría concluir que el territorio de los países del Sur son objeto de un uso abusivo, tanto para sembrar transgénicos para la venta, así como campos abiertos de experimentación. En este escenario geopolítico, África del Sur actúa como un actor crítico en la proliferación global de los OGM en los países en desarrollo.

El suelo de África del Sur ha sido usado por Monsanto, Delta & Pinelands, Syngenta para ensayar sus nuevos organismos genéticamente modificados, y subsecuentemente exportarlos a Colombia, Las Filipinas, Indonesia y Zimbabwe.

Un pequeño número de corporaciones controlan el comercio internacional de organismos genéticamente modificados, independientemente de dónde sean sembrados. Por ejemplo, Pioneer exporta semillas transgénicas de Chile para ser plantadas en África del Sur. Comerciantes de semillas, exportadores de granos y otras empresas como Cargill, Seabord y Louis Dreyfus importan y exportan soya, algodón y maíz GM de Argentina, Uruguay, Chile y otros países con el único fin de asegurar sus ganancias.

EXPORTANDO ALGODÓN GM A UN CENTRO DE DIVERSIDAD

Colombia es un centro de diversidad del algodón. África del Sur exportó a ese país 131. 250 Kg. de algodón Bt. Esta inmensa cantidad de semillas GM estaban destinadas para ser sembradas a nivel “semi comercial”. Durante junio del 2003, África del Sur exportó además 4.500 Kg. de algodón RR a Colombia.

Al mismo tiempo, el proceso de autorización en Colombia tuvo una serie de irregularidades. Por ejemplo, el algodón Bt de Monsanto fue aprobado con propósitos semi comerciales sin que exista un adecuado estudio de impacto ambiental, y el permiso fue otorgado apenas luego de dos estudios de campo en un solo sitio. En todo caso, estos estudios de campo fueron llevado a cabo por Monsanto. Es importante señalar que Monsanto fue el responsable del reporte final, que sirvió de base en el proceso de aprobación. Un empleado de Mosanto además actuó como Vicepresidente del organismos que asesoró al gobierno en la autorización final del cultivo GM.

Debido a estas irregularidades, el Grupo Semillas y otros grupos presentaron una acción legal en contra de la aprobación del maíz Bt. El Tribunal donde se presentó el caso reconoció que esta aprobación violó los derechos colectivos, a la salud y a un ambiente sano, así como el derecho de los consumidores y el derecho de la participación pública en las decisiones que puedan afectar al ambiente.

A pesar de que tanto África del Sur como Colombia son Partes del Protocolo de Cartagena, y a pesar de que no han implementado sus obligaciones dentro del Protocolo, estos países están comercializando OGM sin tomar ninguna medida adecuada de bioseguridad, y al contrario, llevan a cabo estas prácticas comerciales de manera secreta, bajo circunstancias donde las consideraciones socioeconómicas no son tomadas en consideración, tal como lo demanda el Protocolo.

Ese comercio es llevado a cabo sin que haya una adecuada aplicación del Principio de Precaución, que constituye la columna vertebral del Protocolo. Las pruebas de campo de OGM representan experimentos sin precedentes para los ecosistemas naturales.

Nota: si alguien desea tener una copia de los permisos de importación y exportación otorgados por el Gobierno de Sud África, puede solicitarlo.
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CARTA DE UN SUDAFRICANO A LOS AMIGOS DE AMERICA DEL SUR

Saludos colegas:

Quiero compartir con ustedes la carta que dirigía a los Ministros de Agricultura y Salud de Sud África en relación de la variedad de maíz transgénico Bt176 de Syngenta.

Es nuestro entendimiento que la mayoría, si no todo el maíz que entra en Sud África, provienen de América del Sur, principalmente del Cono Sur; posiblemente de Argentina y Uruguay. No estamos diciendo que todas estas naciones plantan estos productos, pero se están usando sus puertos como puntos de embarque y por lo tanto, están contribuyendo de manera inadvertida a nuestro problema en Sud África.

Nosotros por lo tanto hacemos un llamado a nuestros colegas en Sud América para que hagan un llamado a sus gobiernos para que prohíban el cultivo, que usen sus puertos como punto de distribución y transborde de esta variedad particular de OGM, y que podamos trabajar de manera coordinada para frenar estos abusos del Protocolo de Cartagena, que nosotros somos signatarios.

Nosotros quisiéramos por supuesto abordar el problema de todas las variedades de OGM, pero podemos pensar en eso en el futuro.

Si ustedes desean recibir más información, pueden contactarme directamente, y siéntanse libres para circular esta carta con sus amigos de la región que podrían estar interesados en cooperar en esto.

Sinceramente

Glenn Ashton
Co-ordinador
SAFeAGE.
The South African Freeze Alliance on Genetic Engineering.
Community House, Salt River Road, Salt River, Cape Town, Republic of South
Africa.7925
Box 13477, Mowbray, 7955
Phone 021 447 8445
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CARTA ADJUNTA

10 de mayo, 2004
Ministro of Agriculture and Land Affairs
Hon. Thoko Didiza
Fax: (012) 321 8558

Ministro de Salud
Hon. Dr Manto Tshabalala Msimang
Fax: (012) 325 5526

RE: DEMANDA PARA PROHIBIR UNA IMPORTACION DE BT176 Y PARA UNA PUBLICA SOBRE LA SEGURIDAD DE LOS ALIMENTOS DERIVADOS DE OGM

De nuestras consideraciones:

Queremos traer su atención sobre la decisión tomado por el Gobierno de España el 29 de abril del 2004, que prohibe el maís GM de Syngenta Bt176 para su cultivo comercial con el argumento que confiere resistencia a la ampicilina, EI texto dice que el Estado español retirara un OGM a instancias de la UE. El maíz Bt 176 podrían provoca resistencia a los antibióticos, GARA). De acuerdo a Richard López de Haro, funcionario de la oficina española de variedades vegetales.

La Autoridad Europea de Seguridad Alimenticia (EFSA) publicó un estudio sobre la utilización de marcadores genéticos con resistencia a antibióticos en plantas GM. (EFSA)

Queremos también señalar que aun en Estados Unidos, el principal productor y exportador de cultivos GM no permite la siembra del maíz Bt 176. aunque la EPA (Agencia de Protección Ambiental) aprobó el maíz Bt 176 en agosto de 1995, en enero del 2000 la EPA determinó que no podía venderse el evento 176 después de enero del 2000. Su preocupación está relacionada con los impactos potenciales en lepidópteros no objetivo.

Varios países europeos incluyendo Austria, Luxemburgo, Francia, Noruega y el Reino Unido han expresado muchas preocupaciones sobre los genes de resistencia a antibióticos. Como resultado de esto, la Unión Europea prohibió los OGM con gens de resistencia a antibióticos Directive 2001/18EC) (Revising Directive 90/220/CEE).

El Departamento Nacional de Agricultura (NDA) aprobó Bt 176 para la venta como alimento humano, animal y procesamiento en África del Sur hace algunos años, y ha otorgado varios permisos de importación de decenas de miles de toneladas de maíz GM de Argentina, conteniendo varias eventos de maíz GM, principalmente MON810, T25, Bt11 y Bt 176.

De acuerdo a su departamento, el maíz GM son importados de Argentina para la industria de alimento animal en el oeste del Cabo, porque es más barato que que comprar maíz en el mercado sud africano.

Queremos recordarle, señora Ministra, que el propósito de la legislación de bioseguridad no permite a la industria abastecerse de un maíz barato en el mercado global, pero le obliga a proteger al público de los riesgos que entrañan los OGM, en base al principio de precaución.

RIESGO DE LA RESISTENCIA DE ANTIBIOTICOS EN Bt 176

Bt176 contiene el gen marcador bla que le confiere resistencia a la ampicilina, un grupo de antibióticos ampliamente usados en la medicina humana y humana. La ampicilina pertenece al grupo de antibiótico de la penicilina. Estos antibiótico son usados para el tratamiento de varias enfermedades graves como la neumonía, la bronquitis y la difteria.

El desarrollo de resistencia a ciertos antibióticos en bacterias es uno de los problemas que más preocupa a la medicina hoy en día. La introducción de OGM que contienen genes de resistencia a antibióticos en la cadena alimenticia aumenta el riesgo de empeorar el problema, ya que el ADN puede sobrevivir en el sistema gastrodigestivo de animales y humanos. Hay evidencias científicas que los alimentos GM pueden transferir sus genes de resistencia a antibióticos a bacterias en el tracto digestivo o a las bacterias en el medio ambiente. Un ejemplo es la publicación de New Scientist: January 30, 1999 (Evaluando los riesgos asociados con el uso de OGM en la alimentación humana). De acuerdo a la Asociación Británica de Medicina, “debe haber una prohibición al uso de los genes de resistencia a antibióticos, debido al riesgo a la salud que significa el desarrollo a resistencia a antibióticos por parte de micro organismos. Este es uno de los problemas de salud pública más amenazante en el siglo XXI. El riesgo que la resistencia a antibióticos pase a bacterias que afecta al ser humano, a través de los genes marcadores en la cadena alimenticia, es algo que no puede resolverse a través de regulación. (British Medical Association. Los impactos de la modificación genética en la agricultura, alimentación y salud. May 1999).

Los riesgos asociados con la resistencia a antibióticos son totalmente inaceptables, especialmente en un país como Sud África, donde la ampicilina es usada para el tratamiento de infecciones oportunistas relacionadas con el HIV y el SIDA.

Red por una América Latina Libre de Transgénicos notransgenicos@accionecologica.org