Inquietantes efectos del Roundup en los seres humanos y el ambiente
El biólogo de la Universidad de Pittsburg, Rick Relyea, descubrió que el Roundup es “muy letal” para los anfibios. Considerado uno de los estudios más amplios sobre los efectos de plaguicidas en organismos no atacados por el producto, en un entorno natural, los resultados de Relyea revelaron que el Roundup provocó una disminución del 70 por ciento en la biodiversidad anfibia y del 86 por ciento en la cantidad total de renacuajos
Deseamos que presten atención a dos estudios realizados recientemente sobre el herbicida Roundup producido por Monsanto, y sus efectos en seres humanos y animales.
El Roundup, con su ingrediente activo glifosato, ha sido considerado durante largo tiempo como un producto seguro para los seres humanos y el ambiente, a la vez de efectivo para la eliminación de malezas. Se utiliza ampliamente junto a los cultivos transgénicos tolerantes a glifosato porque elimina todas las demás plantas salvo los cultivos transgénicos, que son manipulados genéticamente justamente para ser tolerantes al glifosato.
Sin embargo, como indican nuevas investigaciones, el Roundup también es peligroso para otras formas de vida y organismos (Nota 1).
El biólogo de la Universidad de Pittsburg, Rick Relyea, descubrió que el Roundup es “muy letal” para los anfibios. Considerado uno de los estudios más amplios sobre los efectos de plaguicidas en organismos no atacados por el producto, en un entorno natural, los resultados de Relyea revelaron que el Roundup provocó una disminución del 70 por ciento en la biodiversidad anfibia y del 86 por ciento en la cantidad total de renacuajos.
En otro estudio, un grupo de científicos dirigidos por Gilles-Eric Seralini, de la Universidad de Caen, Francia (Notas 2 y 3) descubrió que las células de la placenta humana son muy sensibles al Roundup en concentraciones menores a las de uso agrícola. Esto, señalan, podría explicar los elevados índices de nacimientos prematuros y abortos observados entre mujeres agricultoras de los Estados Unidos que utilizan glifosato.
Hay poderosos intereses en juego, porque el uso de glifosato es inherente al de las plantas modificadas genéticamente, concebidas específicamente para “tolerar” ese ingrediente activo.
Es por esos efectos alarmantes en los seres humanos y el ambiente que aconsejamos tener cautela en cuanto a la adopción de los cultivos transgénicos tolerantes a glifosato y el uso asociado del herbicida Roundup.
Nota 1
El Roundup es altamente letal para los anfibios, revela investigador de la Universidad de Pittsburgh - Comunicado público de fecha 1de abril de 2005: ver aquí
Contacto: Karen Hoffman: ude.ttip@25hlk / 412-624-4356 / Centro Médico de la Universidad de Pittsburgh
Pittsburgh - El herbicida Roundup es ampliamente utilizado para la erradicación de malezas. Pero un estudio publicado hoy por un investigador de la Universidad de Pittsburgh revela que el producto químico puede estar erradicando mucho más que eso.
El profesor adjunto de Biología, Rick Relyea, de Pittsburgh, descubrió que el Roundup, el segundo herbicida más comúnmente aplicado en los Estados Unidos, es “altamente letal” para anfibios. Este experimento de campo es uno de los estudios de mayor alcance sobre los efectos de plaguicidas en organismos no atacados por el producto, en un entorno natural. Los resultados pueden constituir un vínculo clave de la disminución mundial de anfibios.
En la investigación titulada "The Impact of Insecticides and Herbicides on the Biodiversity and Productivity of Aquatic Communities" (El impacto de insecticidas y herbicidas en la biodiversidad y productividad de las comunidades acuáticas), publicado en el periódico Ecological Applications, Relyea examinó las respuestas de toda la comunidad de un estanque –25 especies, incluidos crustáceos, insectos, caracoles y renacuajos– a las dosis recomendadas de dos insecticidas –Sevin (carbaryl) y malatión– y dos herbicidas –Roundup (glifosato) y 2,4-D.
Relyea descubrió que el Roundup provocó una disminución de la diversidad de anfibios del 70 por ciento y una reducción del 86 por ciento en el número total de renacuajos. Los renacuajos de las especies Rana pipiens y rana arbórea gris (Hyla versicolor) fueron exterminados por completo y los renacuajos de Rana sylvatica y de sapo casi desaparecieron. Una especie de rana, Pseudacris crucifer, no resultó afectada.
“Lo más alarmante que surgió de todo esto fue que el Roundup, concebido para eliminar plantas, resultó altamente letal para anfibios”, dijo Relyea, quien dirigió la investigación en el Laboratorio Pymatuning de Ecología, en Pittsburgh. “Agregamos Roundup y al día siguiente, cuando observamos los tanques, había renacuajos muertos en todo el fondo”.
Relyea inició el experimento para estudiar si el Roundup tenía un efecto indirecto en las ranas al exterminar su fuente de alimento, las algas. Pero descubrió que el Roundup, si bien es un herbicida, en realidad aumentó la cantidad de algas en el estanque porque mató a la mayoría de las ranas.
“Es como matar a todas las vacas de un campo y comprobar que el campo tiene más pasto, no porque uno hubiera logrado que el creciera mejor, sino porque mató a todo lo que lo come”, explicó.
Investigaciones previas habían revelado que el ingrediente letal del Roundup no es el herbicida en sí, el glifosato, sino más bien el surfactante o detergente que favorece la penetración del herbicida en la superficie cerosa de las plantas. En el Roundup, ese surfactante es un producto químico llamado polyethoxylated tallowamine. Otros herbicidas tienen surfactantes menos peligrosos; por ejemplo, el estudio de Relyea reveló que el 2,4-D no provocó efectos en los renacuajos.
“Repetimos el experimento, así que tenemos confianza que se trata, de hecho, de un resultado reiterable”, dijo Relyea. “Es justo decir que nadie había pensado que el Roundup fuera tan letal para los anfibios”.
Nota 2
COMUNICADO DE PRENSA
El grupo del Profesor Gilles-Eric Seralini, de la Universidad de Caen (Normandía, Francia) acaba de publicar resultados originales relativos a la toxicidad del Roundup. Es uno de los herbicidas más utilizados en todo el mundo y el más utilizado con plantas modificadas genéticamente (transgénicas).
La mayoría de los transgénicos comercializados en el mundo están diseñados para alimentación humana y animal. Esas plantas han sido modificadas para permanecer vivas después de haber absorbido el herbicida que se aplica sobre los cultivos.
Eso facilita mucho su uso, pero también la presencia de residuos del herbicida en la cadena alimenticia. Se lo reconoce además como un contaminante comúnmente presente en los ríos.
En este trabajo se demuestra que las células placentarias humanas son muy sensibles al Roundup, en concentraciones por debajo de las utilizadas en la agricultura. Esto podría explicar los abortos y nacimientos prematuros experimentados por trabajadoras rurales de los Estados Unidos. Además, por debajo de los niveles tóxicos, los efectos del Roundup se miden por la síntesis de las hormonas sexuales; esto permite clasificar a este herbicida como posible disruptor o perturbador endócrino. Por último, los efectos del Roundup son siempre mayores que los del glifosato, conocido como su componente activo.
Este trabajo fue apoyado en especial por CRIIGEN ( www.crii-gen.org) y por la organización “Fondation pour une Terre Humaine".
Contacto: Pr. Gilles-Eric SERALINI, tel. 33 2 31 56 54 89, rf.neacinu.afbi@negiirc
Environmental Health Perspective
- Efectos diferenciados del glifosato y el Roundup en células placentarias humanas y en la aromatasa.
Sophie Richard, Safa Moslemi, Herbert Sipahutar, Nora Benachour, Gilles-Eric Seralini doi:10.1289/ehp.7728 (disponible en http://dx.doi.org/)
Febrero de 2005
Resumen
El Roundup es un herbicida basado en el glifosato, utilizado en todo el mundo, incluso en la mayoría de las plantas modificadas genéticamente, las cuales pueden tolerarlo. Sus residuos pueden entrar de esa forma en la cadena alimenticia y se ha detectado contaminación por glifosato en los ríos. Algunas trabajadoras rurales que utilizan glifosato presentan problemas en el embarazo, si bien se cuestiona el mecanismo de acción de este compuesto en los mamíferos. En esta investigación demostramos que el glifosato es tóxico para las células JEG3 placentarias humanas dentro de las 18hs de su aplicación, en concentraciones menores a las utilizadas en la agricultura; este efecto aumenta con la concentración y el tiempo de exposición, o en presencia de compuestos potenciadores del Roundup. Asombrosamente, el Roundup siempre es más tóxico que su ingrediente activo. Comprobamos su efecto en la aromatasa, la enzima responsable de la síntesis de los estrógenos, en concentraciones más bajas no tóxicas. El herbicida actúa como disruptor endócrino de la actividad de la aromatasa y de los niveles de mARN, y el glifosato interactúa con la región activa de la enzima purificada, pero en microsomas o en cultivos celulares la formulación del Roundup favirece esos efectos. Concluimos que es posible observar efectos endócrinos y tóxicos del Roundup y no solamente de glifosato en mamíferos. Sugerimos que la presencia de potenciadores del Roundup aumenta la disponibilidad biológica y/o la bioacumulación de glifosato.
Nota 3
El Roundup no envenena solamente malezas
Por Herve Morin Le Monde, 12 de marzo de 2005 http://www.truthout.org/issues_05/032805HB.shtml
El herbicida más utilizado en el mundo, el Roundup de Monsanto, y sus competidores, que están formulados -al igual que el Roundup- sobre una base de glifosato, han tenido una larga reputación de inocuidad para la salud humana y el medio ambiente. Sin embargo, diversos estudios recientes parecen indicar que este ingrediente activo, utilizado por agricultores así como por servicios de paseos públicos y jardineros, podría no ser tan inofensivo como aducen sus promotores. Hay grandes intereses detrás, porque la utilización de glifosato aumenta junto con la de los organismos modificados genéticamente, la gran mayoría de los cuales han sido concebidos específicamente para “tolerar” este ingrediente activo, letal para las plantas.
De hecho, si bien el Roundup y otros productos similares fueron utilizados originalmente para combatir malezas, “se han convertido en productos alimenticios, ya que son utilizados en transgénicos, que pueden absorberlos sin ser destruidos”, sostiene el bioquímico Gilles-Eric Seralini. Miembro durante años de la Comisión Francesa de Genética Biomolecular, responsable de la preparación de los archivos para las solicitudes de estudios de campo, luego de la comercialización de transgénicos, incesantemente exige estudios más profundos sobre sus posibles impactos en la salud.
Miembro también de Criigen, una asociación que ha hecho del control de los transgénicos su pasión, ha orientado su propia investigación al estudio del impacto del glifosato. En un artículo publicado el 24 de febrero en el periódico estadounidense Environmental Health Perspective (Perspectiva de la Salud Ambiental), el bioquímico y su equipo de la Universidad de Caen demuestran, in vitro, varios efectos tóxicos de este compuesto así como de los aditivos asociados al mismo que cumplen la función de facilitar su difusión.
Para su estudio, los investigadores utilizaron líneas de células de placenta humana en las cuales se aplicó una dosis muy débil de glifosato, que mostró efectos tóxicos y, aún en concentraciones muy débiles, alteraciones endócrinas. Esto, para Gilles-Eric Seralini, podría explicar los altos niveles de nacimientos prematuros y abortos observados en ciertos estudios epidemiológicos -que, no obstante, son controvertidos- que abarcan a mujeres agricultoras que utilizan glifosato. “El efecto que hemos observado es proporcional a la dosis, pero también al tiempo de exposición”, subraya.
Su equipo también ha estudiado los efectos comparativos del glifosato y el Roundup y ha observado que el producto comercial es más perjudicial que su principal ingrediente activo aislado. “Por consiguiente, la evaluación de herbicidas debe tomar en cuenta la combinación con aditivos del producto”, expresa.
Gilles-Eric Seralini reconoce que su estudio debe ser ampliado con experimentos en animales. Pero rechaza las críticas que ha recibido sobre la ausencia de un vínculo real entre la utilización in vitro y la normal. “Los agricultores diluyen el producto puro y están expuestos a dosis 10.000 veces más fuertes”, insiste. “Nuestros resultados demuestran que hay que tener en cuenta el periodo de exposición”.
Modelos de erizo de mar
Robert Belle, de la estación biológica del Centro Nacional de Investigación Social (CNRS, por su sigla en inglés) de Roscoff (Finisterre), se sumó a las conclusiones. El equipo de Belle ha estudiado durante varios años el impacto de los productos en base a glifosato en células de erizos de mar. Este reconocido modelo para el estudio de las etapas tempranas de la génesis del cáncer le dio a Tim Hunt el Premio Nobel 2001 en Medicina. En 2002, el equipo de Finisterre había demostrado que el Roundup interfiere en una de las etapas claves de la división celular.
“Esta alteración puede provocar cáncer”, advierte Rober Belle, quien, para hacerse entender, insiste en resumir los mecanismos de la génesis del cáncer: durante la división de una célula en dos células hijas, las dos copias de herencia genética, en forma de ADN, pueden dar lugar a diversos y numerosos errores, hasta 50.000 por célula. Es por eso que automáticamente se ponen en funcionamiento mecanismos de reparación o muerte natural de la célula (apoptosis). No obstante, ocurre que una célula puede escapar a esas alternativas (muerte o reparación) y perpetuarse a sí misma de forma inestable, potencialmente cancerosa, en el largo plazo.
El equipo bretón ha demostrado recientemente (Toxicological Science, diciembre de 2004) que el Roundup afecta a una de las “regiones de control” del daño del ADN, si bien el glifosato solo no tuvo efectos. “Hemos demostrado que es un factor de riesgo claro, pero no hemos evaluado la cantidad de formas de cáncer potencialmente inducidas, ni el tiempo dentro del cual éstas se declararían”, reconoce el investigador. Una sola gotita [de Roundup] podría afectar a cientos de células. Por otra parte, “la concentración en agua y frutas es más baja, lo cual es algo tranquilizador”.
Para el investigador no se trata necesariamente de prohibir el producto: “Ahora le corresponde a las autoridades públicas evaluar los beneficios y los riesgos”-pero es importante que los usuarios tomen todas las precauciones posibles, tanto para sí mismos como para el público. “He visto a gente en ropa interior fumigando varios metros cuadrados de un campo de juegos”, exclamó, indignado.
No obstante, “esos estudios in vitro no son suficientes para deducir los efectos que tendría [el Roundup] en los seres humanos”, insiste Sophie Gallotti, coordinadora de estudios de contaminantes de la Agence francaise pour la securite sanitaire des aliments (Afssa) [Agencia francesa de seguridad sanitaria de los alimentos]. Lo mismo expresa Remi Maximilien, especialista en toxicología de Afssa, para quien el experimento en erizos de mar “muestra un posible mecanismo para la génesis del cáncer, que todavía debe ser experimentado en seres humanos”.
Una interpretación rebatida
A Monsanto no le impresionan esos resultados. “No nos corresponde a nosotros juzgar el interés de esas publicaciones, cuya validez no impugnamos, pero sí la interpretación”, indica Mathilde Durif, vocera de la filial francesa de la gigante estadounidense. Los resultados contradicen otros sesenta estudios y “ni las autoridades europeas, ni la Organización Mundial de la Salud, ni la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) han clasificado a este producto como cancerígeno”.
No obstante, el glifosato es un ingrediente activo y “es necesario utilizarlo siguiendo las recomendaciones indicadas”. Una actitud cautelosa que parece estar en leve contradicción con los esfuerzos de la empresa por imponer el producto en el mercado, puestos ahora en entredicho por la asociación bretona, la cual censura a Monsanto por hacer de la “biodegradabilidad” de su producto un argumento propagandístico –el cual ya fue juzgado falso por el sistema jurídico estadounidense.(FIN) Third World Network Biosafety Information.
Fuente: Red Para el Tercer Mundo