"El correo de las mujeres del campo"
Sin duda que muchos procesos son de largo aliento, pero bien sabemos que de todas maneras las aguas siguen su curso, con o sin pandemia, incluso, con victoria o derrotas nuestra organización continuará sembrando de esperanzas el camino de nuestras luchas porque estamos frente a “un tiempo que no acaba”.
“Problemático y a la vez esperanzador” toda vez que nuestra organización se adentra en el gran reto que tenemos por delante, nuestro tercer congreso nacional programático sin duda que con mucha alturas de miras abordaremos los temas más candentes de nuestra actualidad: el ascenso aparentemente indetenible de nuevas derechas y sectores ultra reaccionarios y sus estrategias usada para lograr atemorizar y confundir a la gente y lograr un rechazo mayoritario a propuesta constitucional del pueblo.
Desde estas páginas no pretendemos hacer un balance o una primera síntesis sobre algunos de los pasos más notables dados por nuestra organización en cada una de las regiones y nuestras concurrencia a nivel nacional que se reflejan en el esfuerzo y sabiduría desplegado con entusiasmo y convicción durante todo el proceso convencional por las mujeres que hacen grande esta ANAMURI.
Nuestro trabajo estuvo centrado como lo verán en las páginas de este correo tan especial que pretende dar una pincelada al que hacer en al menos tres campos decisivos de nuestra acción, primero “el trabajo comunicacional”, que nos mantuvo activas y en sintonía durante toda la pandemia, no solo comunicándonos o acercándonos mediante el zoom, sino creando y desarrollado un sinfín de estrategias comunicacionales que nos mantuviéramos con la moral en alto, unidas y con mucha mística enfrentar los procesos políticos que se llevaron a cabo durante la pandemia y con las cuatro elecciones nacionales, nuestras escuelas de agroecología en el IALA Sembradoras de Esperanza y las de agricultura urbana que entrelazan generan nuevas alianzas con los sectores populares de la ciudad y amplia nuestros horizontes en la formación educación política y lo tercero el proceso constituyente, uno de los pasos más significativos que logra situar la soberanía alimentaria, la agricultura campesina, la validez del mundo rural en esa constitución del pueblo donde un trozo de esa historia lo hicimos nosotras y lo defenderemos con fuerza para no retroceder en este nuevo proceso tan manoseado en negociaciones oscuras y perversas donde las fuerzas del mal pretenden a toda costa dar continuidad a la constitución pinochetista.
¿Estamos derrotadas? NO, estamos alerta, más sabias y con dolor hemos aprendido que los procesos no son de la noche a la mañana, que nos falta más trabajo en la base y con las otras organizaciones sociales y populares, que debemos fortalecer nuestras organizaciones y generar nuevas y más alianzas. Recuperando el protagonismo de la gente del campo elevaremos nuestra mística en pos de nuestro Congreso Nacional y los 25 años de lucha de ANAMURI. Gran tarea compañeras para este año 2023 donde renace con más fuerza la esperanza.
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Fuente: ANAMURI