Argentina: soja, medios y los debates pendientes

La continuación mediática del debate Grobo-Mempo-Ferrer de anoche en TN me quitó el sueño. Por eso aprovecho la madrugada para tratar de aportar algunas luces al tema.

Por un lado el telón de fondo del debate con Jorge Lanata y Jorge Fontevechia haciendo causa cerrada con el Grupo Clarín en el tema Papel Prensa le puso una cuota de patetismo al debate que hizo difícil aguantar los 45 minutos que transcurrieron en sus alegatos hasta llegar al debate de fondo sobre le modelo agrícola.

Por otro lado los valiosos aportes de Mempo Giardinelli criticando el modelo de la soja por contaminante, deforestador y por no contemplar los riesgos que significan los transgénicos y de Aldo Ferrer defendiendo un rol activo del Estado en la definición de las políticas -incluyendo las retenciones- no alcanzaron para dar una mirada profunda y abarcativa al tema.

Pero el marco del debate “entre amigos” me dejó un sabor amargo. Y el mensaje de que los tres buscan lo mejor para la Argentina resulta en uno de los casos poco creible...

Porque nadie duda de las intenciones, trayectoria y ejemplo de Mempo y Ferrrer. Pero lo de Grobo....lo de Grobo es otra cosa.

Porque el modelo sojero es parte de una de las grandes apuestas del agronegocio corporativo que desde hace décadas se ha lanzado a controlar la alimentación mundial para convertir nuestros alimentos en mera mercancia. Y tiene nombres propios que son pesos pesados en el juego (Monsanto en el inicio de la cadena y Cargill, Bunge y ADM en el cierre exportador) y que sin embargo no han sido nombrados y evaluados en sus responsabilidades en el debate iniciado hace dos años con la 125.

Porque la soja trangénica es una creación de Monsanto que combina la venta de la semilla hecha a medida para el herbicida que el mismo creó y fabrica. Y de esta manera se garantiza un negocio redondo que lo ha puesto al tope de los ganadores mientras en el mundo estallaba la crisis alimentaria.

Porque, al contrario de lo que afirma Grobo, Argentina no tiene ninguna regulación legislativa del cultivo de transgénicos. Nunca se discutió el tema en el Congreso Nacional y la CONABIA es un mamarracho creado en los 90 por el entonces Subsercretario de Agricultura Felipe Solá que simplemente le pone la firma a los expedientes que presentan las corporaciones.

Porque el negocio de la soja es un claro ejemplo de como la especulación financiera ha llegado al terreno de la agricultura y hoy son fondos de inversión y pooles de siembra los principales actores del negocio mientras los agricultores rentan sus campos y los campesinos son expulsados de sus tierras. Y el principal “milagro” del modelo sojero es que los “mercados” han puesto alto su precio internacional.

Porque este modelo se basa en el extractivismo brutal, una minería industrial de nuestros suelos, que está devastando el territorio Argentino. Las cantidades de nutrientes y agua que se extrae y se va en los barcos cada año es impresionante y ha sido bien documentada por muchos investigadores.

Porque el efecto tóxico del glifosato viene siendo denunciado desde años por las comunidades afectadas y el trabajo de Andrés Carrasco difundido días atrás por este medio viene a corroborar lo que miles vienen sufriendo en carne propia.

Todo esto Grobo lo soslaya intencionalmente detrás del manto de ciencia, progreso y buena voluntad nac&pop que nos quiere vender. Por eso Grobo nunca será mi amigo.

El cierre de Mempo planteando lo grave de las afirmaciones tremendistas de Lanata y Fontevechia en el otro debate me hizo sentir que no todo está perdido. Ojalá podamos darle también otra vuelta de tuerca a este debate, donde otras voces que desde hace décadas demandan su espacio puedan ser escuchadas. Vuelvo a dormir más tranquilo....

Carlos A. Vicente, GRAIN, Acción por la Biodiversidad - Red Nacional de Acción Ecologista - gro.aldadisrevidoib@ofni