La Justicia Federal dispuso la expulsión de la Lof Pailako de su territorio ancestral en el Parque Nacional Los Alerces. Pero el despliegue del Ministerio de Seguridad de la Nación no tuvo el efecto esperado: la comunidad se retiró antes de la llegada de la Policía Federal y de la Gendarmería. Un entramado político-judicial de despojo y vulneración de derechos.