Resistencia a antibióticos y empobrecimiento de los cultivos son dos de los riesgos de los alimentos modificados genéticamente, cuyo cultivo abarcaba en 2004 un total de 81 millones de hectáreas. La profesora Alicia León afirmó ayer en Avilés que no está suficientemente probada su inocuidad, y rompió una lanza en favor de que los científicos estudien e informen de esta práctica biotecnológica para evitar riesgos en la salud y el medio ambiente