La consulta popular puede ser una herramienta vigorosa para construir democráticamente una sociedad libre y empoderada. La participación popular es la base misma de la democracia. Por eso, saludamos la convocatoria del presidente Moreno, que se presenta como un intento por recuperar la esencia del proceso que nos llevó a la constituyente de Montecristi y luego a elaborar participativamente la Constitución de 2008. Pero, al mismo tiempo, creemos que debemos dejar plasmada nuestra sensación de que la consulta es insuficiente.