El día siete de febrero fui amonestado por las autoridades de la Fuerza Naval de Honduras y los Guardaparques de la Fundación Cayos Cochinos, los que me prohibieron acercarme al entorno del Cayo Paloma, señalando que estaba interrumpiendo la grabación del programa de televisión conocido como Realiti Chow. Esta no es la primera vez que a los garífunas que habitamos el cayo de Chachaute se nos prohíbe acercarnos al Cayo Paloma. Las autoridades nos prohíben llegar al cayo, mientras la Fundación ha venido y sigue haciendo negocios con los realitis que efectúan compañías extranjeras en ese lugar.