"Para el Banco Mundial, un promotor clave de la agricultura industrial en el Sur Global, esta resistencia es un problema, ya que los derechos tradicionales sobre la tierra se interponen en el modelo de desarrollo económico propuesto por el Banco. Según la institución, "los derechos de los indocumentados (sobre la tierra) plantean desafíos y riesgos para los inversionistas" y, en el caso de África, el desarrollo del continente está "frenado por la confusión con la propiedad de la tierra".