"A pesar del embate extractivista, los pueblos originarios, los campesinos y pescadores mexicanos resisten a pesar del expolio y están decididos a permanecer en sus territorios ancestrales, así como a mantener el uso social y colectivo de la tierra. También por cierto, a seguir sembrando y cultivando como se ha hecho por generaciones de manera sustentable. Ellos son nuestra mejor garantía de sustentabilidad ambiental y de soberanía alimentaria."