Compañeros y compañeras, nuestros abuelos y abuelas nos enseñaron que la lucha por la vida, la dignidad y la tierra es para toda la vida, que nunca acaba la defensa por la madre tierra es por eso que el desalojo de ayer 9 de enero del mal gobierno no pone triste nuestro corazón sino que lo llena de mayor valor para hacer mas fuerte el movimiento y la defensa por la tierra y el territorio.