"Convencidos de la necesidad de una mayor protección de los derechos humanos de los campesinos y otras personas que trabajan en las zonas rurales, y de una interpretación y aplicación coherentes de las normas y estándares internacionales existentes en materia de derechos humanos en esta materia, el 28 de septiembre queda aprobada la Declaración de las Naciones Unidas sobre los Derechos de los Campesinos y de Otras Personas que Trabajan en las Zonas Rurales".