Soberanía Alimentaria en la Educación Pública Argentina
La educación secundaria de la provincia de Buenos Aires, una de las principales regiones agro-exportadoras del Mercosur, incluirá en su programa una cátedra de soberanía alimentaria
Por muchos años se conoció internacionalmente a la Argentina como “el granero del mundo”. Fama que alcanzó como proveedora de productos agropecuarios a Europa, cuando ésta quedó desabastecida de alimentos y sin recursos para producirlos a causa de las guerras mundiales.
Por sus condiciones naturales Argentina puede producir y abastecer de alimentos a aquellos países que no pueden hacerlo por diferentes razones.
Sin embargo, la sociedad argentina sufre las consecuencias de un modelo agrícola neoliberal: hambre, pobreza, falta de empleo. Un modelo que pasó de la multiplicidad de cultivos y la producción agroganadera destinada a satisfacer necesidades alimenticias, a la producción de monocultivos: “commodities” (productos primarios cuyos precios se fijan internacionalmente), con el desplazamiento de la ganadería.
Hasta la década del 90, cuando se implementó el modelo vigente, el promedio de cabezas de ganado vacuno era de 60 millones, y de 50 millones el de cabezas ovinas. La producción con soja transgénica implementada a partir del año 1996 redujo este promedio a menos de 50 y de 10 millones de cabezas respectivamente, siendo ésta una de las causas de los elevados precios de la carne.
En este marco, se presentó en La Plata, capital de la provincia de Buenos Aires, una de las principales regiones agro-exportadoras del Mercado Común del Sur (MERCOSUR), la cátedra abierta “Ambiente, producción sustentable y soberanía alimentaria”, destinada a formar parte de los ejes de la educación secundaria de la provincia con el objetivo de extenderla a todo el país.
Buenos Aires es la provincia con mayor población de Argentina, duplicando a otras provincias como Tucumán o La Rioja, pero también es la de mayor índice de indigencia, de analfabetismo y de desplazados del campo a la ciudad, siendo una importante provincia de la Región Pampeana, por excelencia agroganadera.
“Nuestro propósito es formar ciudadanos críticos y una clase política futura capaces de decidir cuales serán los mejores modelos a implementar”, explicó Hugo Bacci, subdirector de Educación Agropecuaria, presente en la inauguración.
Por su parte, el Director de Parques Nacionales, el licenciado Bruno Carpinetti, agregó: “Es darle a las generaciones futuras la posibilidad de pensar un proyecto autónomo de país”.
También estuvieron presentes el Ingeniero Agrónomo, profesor de la Universidad Nacional de Morón y miembro del Grupo de Reflexión Rural, Adolfo Boy; el coordinador de la Cátedra Libre de Soberanía Alimentaria de la Universidad Nacional de La Plata (UNLP), Carlos Aprea; y Santiago Sarandon, Ingeniero Agrónomo y director de la Cátedra de Agroecología de la UNLP. Todos miembros del cuerpo docente de la cátedra abierta.
Con una fuerte crítica al modelo de educación tecnificada y falta de crítica sobre todo en la universidad, la cátedra abierta para adolescentes tiene el propósito de poner en duda este modelo y reflexionar sobre uno de los más importantes derechos humanos de hoy: la alimentación.
Adolfo Boy explicó que la cátedra no formará parte de un modelo educacional cuantitativo, atomizado y fragmentado como el que hoy se practica en las escuelas, donde es más importante memorizar fechas, números, estadísticas, que reflexionar.
Por el contrario, se intentará entender a la naturaleza relacionando todos los seres vivos incluyendo al hombre como parte del ambiente natural. Concibiendo que el crecimiento no se limita a lo cuantitativo.
Es la primera vez que se manejará el concepto de “soberanía alimentaria” para trabajarlo con una generación de jóvenes que pocas veces lo ha escuchado de un Estado que tiene la obligación de definir una política agropecuaria, pesquera y alimenticia que satisfaga las necesidades de una alimentación sana, nutritiva y culturalmente apropiada.
La Argentina ha perdido su soberanía, puede verse de forma concreta en cualquier mercado, con la importación de diversos productos y en la posible importación de leche para este invierno.
La “Soberanía Alimentaria” tiene un valor sociológico y cultural que, según Boy, no debe perderse: “El ritual de la comida. La reunión alrededor de la mesa. Se trata de querer y valorar donde uno ha nacido”.
La “Soberanía Alimentaria” está ligada inseparablemente al desarrollo de políticas sustentables y a un cambio profundo en el modelo agropecuario que hoy sólo asegura ganancias para pocos productores, costos a toda una sociedad por el desgaste y contaminación de la naturaleza y alimentos poco nutritivos.
Por esta razón, para Santiago Sarandon el modelo vigente no es sustentable: “Hay que desarrollar un modelo que alimente a las generaciones de hoy sin comprometer a la generación futura”.
La cátedra abierta “Ambiente, Producción Sustentable y soberanía alimentaria” estará formada, entre otros, por un cuerpo docente de diferentes Facultades de la UNLP que llevan años trabajando por fuera de los planes oficiales y coordinando con organizaciones sociales.
Adolfo Boy sintetiza el espíritu de todos los que forman la cátedra abierta: “Es nuestro desafío reconstruir el sentimiento soberano de comer y producir lo que la tierra nos da y que respetuosamente le hemos tomado”.