Puerto Rico: etanol, propuesta errónea
En Puerto Rico oímos con creciente insistencia la propuesta de sembrar caña de azúcar para hacer etanol para sustituto de gasolina. Esta propuesta es extremadamente preocupante por varias razones
"Environment 360", boletín ambiental de la Universidad de Yale, publicó unos datos muy pertinentes sobre el etanol de caña en Brasil, recopilados por los profesores David Pimentel y Ted Patzek, de las Universidades de Cornell y California respectivamente. He aquí algunos de sus hallazgos:
* El etanol de caña no sustituye a los combustibles fósiles pues se requiere de 393 kilogramos de combustible fósil para poner una hectárea de caña de azúcar a producir. Esto se debe no solamente al uso de maquinaria sino también a los insumos químicos, como pesticida y fertilizante, que se hacen con combustible fósil.
* Cada litro de etanol requiere de 12 a 14 kilogramos de caña.
* Se requieren 7 mil litros de agua para hacer un litro de etanol.
* Por cada litro de etanol, se producen 10 litros de agua sucia contaminada.
* Cada hectárea de caña pierde 31 toneladas de suelo a la erosión.
El que los biocombustibles -como el etanol y el biodiesel- compiten con la producción de alimentos es un hecho tan obvio y bien documentado que ya ni siquiera se puede cuestionar en un debate serio. Un estudio del Banco Mundial dirigido por el economista Don Mitchell concluyó que los biocombustibles fueron responsables de 75% de la súbita alza en los precios mundiales de alimentos el año pasado.
No le echen la culpa de la crisis alimentaria mundial a la creciente demanda de China. El profesor Darryl Ray, de la Universidad de Tennessee, examinó datos del propio departamento de agricultura federal y determinó que la demanda china tuvo poco o nada que ver con la crisis alimentaria que se desató en 2008.
No podemos hablar de echar adelante la agricultura puertorriqueña para asegurar nuestra seguridad alimentaria y a la vez favorecer que se dediquen miles de hectáreas de nuestros escasos terrenos agrícolas a la producción de biocombustible de etanol para alimentar carros. O nos peinamos o nos hacemos rolos.
El foco de los esfuerzos por afrontar la crisis energética y contrarrestar el calentamiento global debe ser la reducción en el uso de energía. Para lograr esto, sería más provechoso invertir en sistemas modernos de transporte público y facilitar el movimiento peatonal y de bicicletas que gastarlos en biocombustibles de dudoso beneficio.
Carmelo Ruiz Marrero
Director del Proyecto de Bioseguridad de Puerto Rico