Minería: que Glamis se marche de Guatemala

La empresa minera Montana Exploradora S.A, subsidiaria en Guatemala de la canadiense Glamis Gold recibió a mediados del año 2004 un préstamo de 45 millones de dólares por parte del Banco Mundial para desarrollar un proyecto de extracción de oro de la mina Marlin, ubicada en la zona oeste de ese país centroamericano. La mina Marlin se ubica en el municipio de San Miguel Ixtahuacan, en el departamento de San Marcos, a unos 300 kilómetros de la capital de Guatemala.

La extracción estimada de oro y plata de la mina Marlin, para un período de trabajo de entre 10 y 15 años, ascienden en promedio anual a más de 200.000 onzas de oro y más de 3 millones de onzas de plata. La mina debería empezar a funcionar en el primer trimestre del año 2006.

El proyecto además contiene fases de explotación a cielo abierto, lo que ha implicado en otros lugares efectos devastadores para el medio ambiente como resultado de la aplicación de cianuro en este tipo de procesos.

Las comunidades afectadas por el proyecto minero han solicitado al gobierno de Oscar Berger que suspenda el proyecto de explotación de la empresa por los fuertes impactos ambientales que genera la presencia de maquinaria e implementos de minería en la región.

En el pasado mes de septiembre, unas 250 personas, integrantes de distintas comunidades de la región afectada se reunieron para hacer público su rechazo a la mina, y afirmando que serán pocos los beneficios para ellos y que en cambio, quedarán sin tierra, con aguas contaminadas y afectadas de muerte sus fuentes de alimento y medicina.

La comunidad de Salem por ejemplo estuvo más de seis meses sin suministro de agua porque debido a la excavación de la montaña se rompió la tubería que conectaba a la comunidad.

A los precios actuales de la onza Troy de oro, y con los volúmenes estimados de extracción de los metales, se prevé que la empresa obtenga ganancias en torno a los 1.183 millones de dólares. De ese monto, solamente el 1 % será volcado a financiar políticas implementadas por el gobierno de Guatemala para las comunidades de la región.

Posteriormente, en el mes de diciembre la empresa anunció que con motivo del traslado a la mina de un equipamiento cilíndrico de acero, de 50 toneladas de peso y que por su gran tamaño no cabía por un puente, debería desarmar el mismo para acceder a la zona de trabajo.

Los pobladores de las comunidades del Departamento San Marcos decidieron bloquear la carretera y en ese contexto se produjo el pasado martes 11 de enero un operativo policial que culminó con la muerte de dos pobladores y decenas de heridos, más precisamente en la aldea Los Encuentros, municipio de Sololá.

El Presidente Oscar Berger afirmó al enterarse del suceso que "habría que investigar de dónde provino el balazo, porque los agentes no llevaban armas. Alguien está azuzando a los campesinos".

Las comunidades denunciaron también que varios de sus integrantes y dirigentes han sido amenazados de muerte por civiles y empleados de la empresa minera, en un proceso de expansión y búsqueda de nuevos yacimientos auríferos en otros lugares de Guatemala.

Radio Mundo Real, Internet, 14-1-05