Marcha de indígenas colombianos llega a las afueras de Bogotá
Miles de indígenas colombianos llegaron hoy a las afueras de Bogotá tras una travesía de más de una semana y 500 kilómetros y esperan ingresar a la capital el jueves para exigir al presidente Álvaro Uribe tierras y que se les excluya del conflicto con las guerrillas, entre otras peticiones
En la antepenúltima etapa de la llamada "minga" (marcha de resistencia), que se inició en Cali, suroeste, el pasado 10 de noviembre, los aborígenes realizaron un ritual "de conciliación y armonización con el agua".
"Así como recogimos y plasmamos nuestras firmas para el 'referendo del agua', la 'minga' es también por la no privatización y venta al exterior del agua que mana de la madre tierra, cuyos guardianes legendarios somos los indígenas", señaló un documento distribuido a los periodistas por los organizadores de la marcha.
El ritual fue celebrado en un punto de la carretera que conecta Bogotá con el suroeste colombiano, en el llamado peaje de Chusacá.
Los indígenas acompañaron en el municipio Soacha, en el área conurbada de Bogotá, a familiares de las víctimas de los llamados "falsos positivos" (civiles que son presentados como guerrilleros muertos en enfrentamientos) del Ejército.
Una veintena de jóvenes de Soacha fueron dados como desaparecidos en enero pasado y presentados como guerrilleros caídos en combate con los soldados a los pocos días, en una región del nordeste, a más de 700 kilómetros de la capital.
Los indígenas colombianos buscan continuar en Bogotá un diálogo con el presidente Uribe en demanda de sus requerimientos.
Día a día decenas de delegados aborígenes de distintas etnias y regiones colombianas se han sumado a la travesía y la Organización Nacional Indígena Colombiana (ONIC) confía en que el jueves se congreguen más de 20.000 para el ingreso a la ciudad, según Eveis Andrade, consejero mayor de la asociación.
El pasado 2 de noviembre se cerró sin resultados concretos un primer encuentro entre el gobernante y miles de estos aborígenes.