Los OGM provocan fuertes divisiones en el seno de la UE
La última polémica desatada por los transgénicos gira entorno a la autorización dos variedades de maíz, una de ellas solicitada por España. La falta de consenso a la hora de aprobar nuevas autorizaciones no sólo entre los 27 sino también en el seno de la Comisión Europea ha llevado en esta ocasión a un grupo de países, encabezado por Alemania, a pedir una revisión del proceso de autorización de transgénicos
Marco Contiero, responsable de OGM de Greenpeace aseguraba tras conocer la noticia: "damos la bienvenida a la iniciativa de varios Estados miembros que piden una valoración final clara sobre el riesgo de algunos productos a nivel europeo".
Mientras que la Comisión Europea se ha mostrado en bloque desfavorable a la revisión del proceso de autorización, el comisario de Medioambiente, Stavros Dimas, ha asegurado que impedirá la autorización de los dos tipo de maíz que están siendo estudiados.
"Es la primera vez que un comisario propone un rechazo basado en argumentos científicos que sólo él conoce y que nadie en la Autoridad Europea para la Seguridad Alimentaria ha visto", explicó la directora de Europa Bio en Bruselas.
La comisaria europea de Agricultura ya ha anunciado que la suspensión temporal del proceso de autorizaciones provocará graves consecuencias en algunos sectores como en el de la carne.