Las mujeres peruanas se encuentran por sus semillas
Del 12 al 24 de octubre, Perú recibe la Marcha de las Semillas, donde más de 1000 mujeres de todo el país discuten seguridad y soberanía alimentaria, trabajo digno, salud, educación de calidad y erradicación de la violencia contra la mujer
La Federación de Mujeres Campesinas, Indígenas, Nativas y Asalariadas de Perú - FEMUCARINAP - convoca a los representantes de diversos movimientos andinos hasta Lima, y las macro regiones Sur, Centro y Norte, donde tendrán lugar encuentros simultáneos y celebraciones.
La semana busca la reflexión de las mujeres junto al pueblo peruano ante un contexto que presenta 300.000 mujeres esterilizadas contra su voluntad por el FMI y el Gobierno Fujimorista y otras 2.000, víctimas de violencia sexual durante el conflicto armado interno; desapariciones; un neoliberalismo desenfrenado a cargo de multinacionales y mineras que contaminan la Pachamama y explotan a los trabajadores con apoyo de un Estado corrompido, represor y culpable por los muertos en sucesivos levantamientos populares; además de la pobreza extrema, condiciones precarias de vivienda y salud y altos índices de analfabetismo que caracterizan ya desde hace tiempo, a las zonas rurales de Perú principalmente.
Sin embargo, el país vive un momento de esperanza tras la ajustada elección de junio - 3% de diferencia -, que derivó en la presidencia del progresista Ollanta Humala, evitando la vuelta del dictador, hoy encarcelado, Alberto Fujimori, quien en busca de su liberación, había colocado a su hija Keiko Fujimori como candidata.
Según Lourdes Huanca, presidente de FEMUCARINAP, los movimientos sociales estaban divididos antes de la primera vuelta, incluso algunos apoyaban al ex presidente Alejandro Toledo, quien en su mandato había aprobado la ley de criminalización de los movimientos sociales, arma que el Estado aprovechó a la hora de reprimir protestas durante ese período y a través de Alan García, en el siguiente Gobierno.
Pero la definición por ballotage entre Humala y Fujimori requirió la unión de movimientos sociales y la izquierda peruana a favor del primero, a pesar de las alianzas que inclinaron al Humalismo hacia el centro. En ese contexto, la Federación de Mujeres Campesinas, Indígenas, Nativas y asalariadas de Perú refuerza su apoyo y reafirma sus exigencias al Congreso Nacional, para sostener conquistas como la de la última semana que extiende por 15 años más, la suspensión a la entrada de semillas transgénicas al país.
Dicho proyecto pretende garantizar que el país sólo reciba, produzca o utilice organismos vivos modificados, cuando el propio Perú tenga la capacidad científica de evaluar las consecuencias que traerá la liberación de tales organismos. Más aún, teniendo en cuenta que 36.000 agricultores se dedican al cultivo orgánico en Perú y este año generarán US$ 252 millones en exportación de alimentos orgánicos.
La suspensión a la liberación de las semillas transgénicas aprobada por unanimidad por la Comisión de Pueblos Andinos, Amazónicos y Afroperuanos, Ambiente y Ecología, también fue defendida por diversos ministros y apoyada por la Primera Dama Nadine Heredia junto a FEMUCARINAP, durante las celebraciones del último viernes, Día Internacional de la Mujer Rural, en la capital del país.
En conjunto con la Marcha de las Semillas, se están desarrollando diversas actividades en todo Perú con el fin de reflexionar e intercambiar experiencias sobre la situación de la mujer peruana de cada región, integrando mujeres del campo y de la ciudad, con un sólo objetivo: "sembrar la semilla de la solidaridad, la esperanza y la paz".