La multinacional Monsanto enfrenta problemas con el Gobierno argentino
Los agricultores argentinos expondrán ante la Oficina Europea de Patentes las "presiones" que la multinacional Monsanto "ejerce" para intentar cobrar derechos extraordinarios por el uso de semillas genéricamente modificadas
Buenos Aires/Efe - El presidente de la Federación Agraria Argentina, Eduardo Buzzi, adelantó ayer a EFE que el próximo martes participará de una audiencia pública convocada por el organismo europeo con sede en Munich.
"En la audiencia se debatirá el otorgamiento de nuevas patentes de cultivos en Europa y queremos expresar allí nuestra solidaridad con los productores agropecuarios de Alemania e Italia que, como nosotros, resisten las presiones de Monsanto", señaló Buzzi.
En la audiencia, el dirigente agrario argentino advertirá sobre los riesgos del "avance de las patentes en vegetales, la privatización de los recursos genéticos, la formación de monopolios sobre cultivos alimentarios de consumo mundial y la ilegalidad de la pretensión de Monsanto".Buzzi expondrá, además, su punto de vista sobre el conflicto que enfrenta su país con la multinacional, que pretende cobrar derechos por el uso de su tecnología transgénica en aquellos países que importen soja RR desde Argentina.
Hace dos semanas, Monsanto anunció su intención de realizar una "acción de fuerza" con todos los embarques argentinos de soja transgénica y sus derivados que lleguen a los países donde la compañía tiene patentada esa tecnología, principalmente en Europa.
Monsanto, que no ha patentado en Argentina la tecnología Roundup Ready (RR, resistente al glifosato, un potente herbicida), pretende cobrar 15 dólares por tonelada exportada en concepto de "daños y perjuicios" por el uso de una técnica sin el pago de una regalía.
Mientras el Gobierno argentino tachó de "bravuconada" la actitud de la multinacional, los agricultores lanzaron un "grito de guerra" porque el cobro de derechos extraordinarios impactará directamente en el precio de los granos.
"Evidentemente, los exportadores pueden cumplir con lo que pretende Monsanto, pero trasladarán el costo al precio que pagan a los productores, que recibirán mucho menos dinero por lo que cultivan", explicó a EFE Buzzi. Por otra parte, los productores argentinos aseguran que pagan 3 dólares en concepto de derechos por el uso de la tecnología cada vez que compran a los intermediarios bolsas de semillas.
La Prensa Grafica , internet, 30-3-05