Fracaso imperdonable de la Cumbre de la Biodiversidad
Los intereses económicos y comerciales de los países ricos han quebrado cualquier esperanza de establecer un acuerdo internacional que garantice la conservación –integridad ecológica- y aprovechamiento regulado y sostenible de la biodiversidad del planeta y, por tanto, ha condenado a la Cumbre de la Biodiversidad, que concluye precisamente hoy, al fracaso, según explica Ecologistas en Acción en una nota remitida a Zona Verde
La pérdida de biodiversidad es, junto al cambio climático, uno de los principales problemas ambientales a escala global. Sus efectos se están notando ya de forma dramática y su desaparición empieza a cuantificarse por los expertos en biodiversidad funcional, por cientos de especies de animales y vegetales. “Es lamentable y bochornoso que los gobiernos no hayan sido capaces de asumir unos mínimos para frenarla a corto-medio plazo”, comenta la organización ecologista.
El actual ritmo de extinción, a escala planetaria, es de unas 74 especies por día, o lo que es lo mismo, 3 especies cada hora.
En el siglo XX, y según las estimaciones más conservadoras, se extinguieron unas 100 especies de aves o mamíferos de las 14.000 especies de mamíferos existentes en su momento. Si extrapolamos esa cifra al resto de los grupos faunísticos (vertebrados, coleópteros, artrópodos, etc.) así como a los taxones botánicos, la cifra de extinción se ha podido haber consolidado en el último siglo en alrededor de unas 10.000 especies por año. Muchas de las especies extinguidas no se han llegado ni tan siquiera a catalogar por parte de los investigadores y estudiosos de la ciencia de la vida.
“Las principales amenazas –explica la nota- no sólo no se han neutralizado sino que además en su mayoría se han intensificado en los últimos años. Se siguen persiguiendo a las especies por distintos motivos fines, se destruye o fragmenta sus hábitats, y se introduce de manera voluntaria e involuntaria especies alóctonas, que en los casos más graves pueden conducir a la extinción a especies autóctonas que compartan nicho ecológico con la especie reciente llegada”.
Ecologistas en Acción demanda a los diferentes gobiernos una apuesta por la vida, por la solidaridad y justicia social. No hay razones para no asumir compromisos y acuerdos que eviten la pérdida de nuestra principal garantía y seguro de vida, la biodiversidad.