Fracasa reunión de la OMC para reactivar agenda de Doha

Luego de una reunión de tres días, los 148 países miembros de la Organización Mundial de Comercio (OMC) fallaron en su intento de reanudar las negociaciones de la ronda de Doha.

"Tenemos problemas, es inútil esconderlo", reconoció la embajadora de Kenia, Amina Mohamed, principal responsable de las negociaciones, quien confió en que los problemas podrán solucionarse con voluntad política.

Mientras, en entrevista desde Ginebra, el subsecretario de Negociaciones Comerciales Internacionales de la Secretaría de Economía, Angel Villalobos, advirtió que existe el riesgo de llegar sin acuerdos a la reunión ministerial de Hong Kong, donde se decidirá el futuro de la ronda de Doha.

El funcionario explicó que persiste la resistencia de Estados Unidos y la Unión Europea a eliminar subsidios en el sector agropecuario y ello impide avanzar en los sectores industrial y de servicios y en políticas antidumping, entre otros puntos.

El objetivo de la reunión era redactar el borrador de un acuerdo mundial sobre liberalización del comercio para presentarlo en Hong Kong, del 13 al 18 de diciembre.

La conferencia de Hong Kong deberá culminar la ronda de negociaciones lanzada en Doha, Qatar, en 2001, cuyo objetivo es que el comercio ayude al desarrollo de los países pobres. Esta etapa debió haber terminado a finales de 2004, pero sigue bloqueada por las diferencias entre países industrializados y en desarrollo en torno a la agricultura. Estas discrepancias ya hicieron fracasar la conferencia ministerial que se efectuó en Cancún en 2003.

Mientras los países industrializados presionan por una rápida eliminación de aranceles, las naciones en desarrollo exigen la eliminación de los subsidios a las exportaciones agrícolas.

El representante comercial de Estados Unidos, Rob Portman, expresó su optimismo sobre las negociaciones, que avanzan a paso "lento pero seguro" . Asimismo, prometió que en septiembre Estados Unidos presentará nuevas propuestas para romper el estancamiento.

Llamado a los pecadores

Angel Villalobos reconoció que existe "un sentimiento de decepción" porque no hubo avances concretos en la fórmula intermedia que planteó el G-20 para conciliar las posturas de Estados Unidos y Europa sobre reducción de subsidios agrícolas y aranceles. Ello "implica el compromiso de trabajar de manera muy intensa de septiembre a noviembre". El G-20 se reunirá en septiembre en Pakistán y al mes siguiente habrá un encuentro de ministros en Ginebra.

Villalobos señaló que el fracaso de esta reunión se debió en parte a las presiones internas que enfrentó el gobierno de Estados Unidos por la firma del Acuerdo de Libre Comercio con Centroamérica y República Dominicana (CAFTA, por sus siglas en inglés).

Confió en que el cambio de director general de la OMC le dé un nuevo impulso a las pláticas, pero insistió en que la clave será que los países desarrollados estén dispuestos a asumir los costos políticos de tomar decisiones que afecten a sus productores agropecuarios.

Las condiciones básicas para que la reunión de Hong Kong tenga éxito, detalló, serán una fórmula de reducción arancelaria claramente definida, una fecha cercana para eliminar los subsidios a la exportación, definir criterios para aplicar reducciones "sustanciales" a los subsidios domésticos y un trato especial y diferenciado para los países en desarrollo.

Los países industrializados son "los grandes pecadores que provocan una distorsión de la producción y la comercialización en el mercado mundial. Ellos tienen la mayor responsabilidad y deben tomar decisiones muy fuertes que han diferido por cuestiones internas. Mientras más pronto lo hagan y asuman el costo esto va a caminar más rápido", señaló Villalobos.

El funcionario dijo tener un "optimismo cauteloso" en torno a las negociaciones, que son similares a las pláticas de desarme: "¿Quién baja las armas primero, quién hace el primer movimiento?"

La Jornada, México, 30-7-05