Ecuador: Correa perdió un apoyo
Los indígenas amenazan con paralizar Ecuador, pero descartan por ahora levantarse contra el gobierno de Rafael Correa. Así lo señaló Marlon Santi, el presidente de la Confederación de Nacionalidades Indígenas de Ecuador (Conaie), que en la última década derrocó a dos presidentes. “Estoy seguro de que podemos paralizar el país. Estamos viendo ventajas y desventajas”, dijo el dirigente
En momentos en que la Asamblea Constituyente debate la explotación minera y los indígenas critican a Correa por su negativa a que las comunidades decidan cómo manejar los recursos, el mandatario se mostró inamovible. “Primero me voy a mi casa antes que aceptar eso”, respondió.
A medida que avanza el proceso constituyente en Ecuador, se profundizan las diferencias entre Correa y los indígenas. En una clara señal de ello, la Conaie se declaró en estos días opositora al gobierno y amenazó con movilizarse para lograr una reforma que les permita a las comunidades, mediante una consulta, decidir sobre la explotación de petróleo y minerales en sus territorios.
“La Conaie ahorita puede levantarse para defender la soberanía alimentaria, pero también necesitamos que otros sectores lo hagan. Levantémonos todos”, exhortó Santi. Consultado sobre la conveniencia de que unos dirigentes hablen de “tumbar” el gobierno, Santi señaló que no es el momento para pensar en aquello. “Por el momento, nosotros no vamos a caer en el juego de tumbar gobiernos. Después de la ruptura del diálogo hemos dicho que vamos a hacer presencia en la (Asamblea) Constituyente, porque ésta no debe obedecer las órdenes del presidente (Correa)”, añadió. Mientras el movimiento oficialista Acuerdo País acapara 80 de los 130 escaños de la Asamblea, que redacta una nueva Carta Magna, la Conaie cuestiona cada vez más al gobierno. “Obedece al gran monopolio enquistado en el poder, las transnacionales, las grandes mineras, petroleras y privatizadoras del agua están ahí. Es mentira que existe socialismo, él es un neoliberal”, señaló Santi. Desde el Palacio de Gobierno, la respuesta fue rotunda. “Qué triste esa miopía política”, dijo el mandatario en su programa semanal de radio. “Por sufrido que haya sido, por postergado, quiera imponer una agenda a las grandes mayorías”, señaló. “Sabemos que corremos riesgos en estos enfrentamientos, pero no vamos a ceder”, afirmó.