Consejo Mundial de Iglesias llama a iglesias a transformar injusticia económica
Frente al modelo de “injusticia económica” que impera en el mundo, las iglesias deben actuar contra los intolerables niveles de pobreza que produce ese modelo, sostuvo el Consejo Mundial de Iglesias (CMI), que lanzará un llamamiento en este sentido en su IX Asamblea a celebrarse en Porto Alegre del 14 al 23 de febrero
"Un mundo sin pobreza, no sólo es posible, sino que está de acuerdo con la gracia de Dios para el mundo", afirma un llamamiento sobre globalización económica, dirigido a las iglesias y movimientos sociales que participaran en la IX Asamblea del CMI.
Titulado "AGAPE - Llamamiento al amor y a la acción", el documento, cuya autoría comparte el CMI con otras organizaciones ecuménicas, insta a las iglesias a "actuar unidas para transformar la injusticia económica", de acuerdo con el tema central de la asamblea: "Dios, en tu gracia, transforma el mundo".
La convocatoria que tiene forma de oración, pide a las iglesias a comprometerse de nuevo a trabajar por la justicia en las relaciones comerciales internacionales, erradicar la pobreza y la desigualdad y a favor de los “préstamos responsables, la cancelación incondicional de la deuda y el control y la reglamentación de los mercados financieros mundiales".
Las iglesias serán invitadas también a actuar en pro de la preservación de los recursos naturales y de la biodiversidad, la resistencia contra la privatización de los bienes y servicios públicos, la promoción de reformas agrarias, la defensa de trabajos decentes y salarios justos, y una firme postura de fe contra los poderes hegemónicos.
Las propuestas del llamamiento AGAPE se basan en el trabajo realizado tras la celebración de la VIII Asamblea del CMI, en Harare 1998, que declaró que "es necesario contraponer a la lógica de la globalización, una forma alternativa de vida comunitaria en la diversidad".
El documento es el resultado de amplias consultas con las iglesias, los movimientos sociales y los organismos ecuménicos, especialmente con la Alianza Reformada Mundial, la Federación Luterana Mundial y la Conferencia de Iglesias Europeas.
El nombre del llamamiento AGAPE, significa “Globalización alternativa al servicio de las personas y la Tierra". Sus conclusiones y recomendaciones han sido recogidas en un documento de 60 páginas destinado a servir de guía de estudio para seminarios y grupos de discusión.
El informe aborda las tragedias humanas causadas por la globalización económica y refleja la esperanza de que las iglesias y la familia ecuménica, trasciendan la crítica a la globalización neoliberal y pasen a elaborar una visión de un mundo justo, compasivo e inclusivo.
Vivimos en una "economía de la copa de champagne", en la que el 20% más rico de la población posee el 83% de la riqueza del mundo, un 20% siguiente posee el 11%, y el mayor contingente humano, un 60% de la población mundial, posee solamente el 6% de la riqueza del mundo, precisa el documento.
"Se espera que el presente documento estimule a las iglesias y a la familia ecuménica para que aborden las complejas cuestiones relativas a la injusticia económica, que es el principal problema de nuestros tiempos", dijo Rogate Mshana, encargado del programa de Justicia Económica del CMI.
Agencia Latinoamericana y Caribeña de Comunicación, Internet, 11-1-06