Colombia: indígenas sin derechos fundamentales
La Misión Internacional de Verificación sobre la Situación Humanitaria y Derechos Humanos de los Pueblos Indígenas de Colombia constató que los pueblos indígenas (hombres, mujeres, niños y niñas, y sus organizaciones) están siendo víctimas de violaciones a los derechos humanos fundamentales y de crímenes de lesa humanidad, tales como: asesinatos políticos, detenciones masivas y arbitrarias, torturas y tratos crueles, desapariciones forzadas, allanamientos, señalamientos, judicializaciones y acusaciones infundadas, retenes permanentes y limitaciones a la movilidad
Esta ha sido la primera conclusión de la Misión que dio a conocer la declaración final del trabajo, lo que arroja varias apreciaciones y recomendaciones.
Entre ellas se destaca "que desde la visita del relator especial de las Naciones Unidas (2004), la situación de los pueblos indígenas de Colombia se ha agravado a tal punto que configura un escenario no sólo de una grave crisis humanitaria, sino de amenaza cierta de extinción".
Esta Misión Internacional tuvo carácter independiente para hacer seguimiento a las recomendaciones hechas en el 2004 por el relatoreEspecial de las Naciones Unidas para los derechos humanos y las libertades fundamentales de los pueblos indígenas, Rodolfo Stavenhagen. Ha sido realizada entre los días 19 y 29 de septiembre de 2006 tuvo como propósito producir un informe para que la comunidad internacional pueda instar al Gobierno de Colombia el cumplimiento de los acuerdos y compromisos internacionales y de orden nacional, en materia de respeto a los derechos de los pueblos indígenas.
La Misión estuvo conformada por organizaciones de derechos humanos y de la sociedad civil de Europa, América Latina, Estados Unidos, y Canadá, con observadores de las agencias de las Naciones Unidas, la Embajada de Suiza, la Embajada de Alemania, la delegación de la comisión europea, y la MAPP-OEA.
Cinco regiones fueron visitadas: la Sierra Nevada de Santa Marta, el Alto Sinú en Córdoba, el Departamento de Arauca, el departamento del Cauca y el Departamento del Guaviare. En cada región la Misión sostuvo entrevistas con las comunidades indígenas y sus organizaciones, recibió testimonios de indígenas víctimas de violaciones de los derechos humanos y el derecho internacional humanitario, y se entrevistó con autoridades locales y departamentales, cívicas, militares y de organismos de control del Estado.
La Misión constató además que los pueblos indígenas están sufriendo los efectos de las graves infracciones al derecho internacional humanitario cometidas por los actores armados en el contexto del conflicto armado interno (la Fuerza Pública, los grupos guerrilleros y paramilitares o desmovilizados). También verificó que el actual proceso de desmovilización de los grupos paramilitares y las normas creadas para ello, no garantizan la verdad, justicia y reparación de los crímenes cometidos por los paramilitares contra los pueblos indígenas, que continúan en una situación crítica.
La Misión constató todavia que en los territorios indígenas se están implementando megaproyectos sin que se respete el procedimiento de consulta previa y los criterios para ello establecidos por los convenios internacionales de la OIT (Organización Internacional del Trabajo), de las Naciones Unidas y por los propios mecanismos internos de concertación establecidos entre el Estado colombiano y las autoridades indígenas.
Se pudo constatar que las violaciones a los derechos fundamentales de los pueblos indígenas están acompañados de violaciones a sus derechos colectivos y que se está creando un marco jurídico normativo que agravaría esta situación. Y pudo observar la situación particular de la educación y la salud de las comunidades indígenas, manifiestando su preocupación por la desatención de parte de las entidades regionales y del Estado central y por la ausencia de mecanismos de concertación con miras a respetar y apoyar las propuestas de las comunidades indígenas.
La Misión recomienda al relator especial de la ONU para los derechos humanos y las libertades fundamentales de los Pueblos Indígenas realizar una pronta visita de seguimiento al cumplimiento de sus recomendaciones; a la Unión Europea y al G24 hacer un seguimiento más detallado a la situación de los pueblos indígenas; al gobierno colombiano no dilatar el cumplimiento de acuerdos con las comunidades y organizaciones indígenas respecto de la titulación de tierras y território, entre otras recomendaciones.