Cargill opera ilegalmente en el norte de Brasil, denuncia Greenpeace
El puerto de la multinacional Cargill, en el municipio de Santarén, en el estado de Pará, norte del Brasil, es uno de los objetivos de las manifestaciones de la Campaña contra el desarmamiento en la región Amazónica, realizada por la Organización No Gubernamental (Ong) ambiental Greenpeace
Según André Muggiati, de la entidad, el puerto es considerado ilegal, porque no realizó el Estudio de Impacto Ambiental, documento exigido por la Constitución Brasileña para que siga operando.
“La Cargill ya fue condenada en dos instancias por la Justicia federal por no realizar el estudio de Impacto Ambiental. Después de esta última condenación que ocurrió en marzo, la empresa tendría 90 días para presentar el EIA [Estudio de Impacto Ambiental] y todavía no presentó ninguna evidencia de que esté realizando ese estudio”.
La Cargill también fue condenada por explotación y deforestación en la Amazonia en el Tribunal de los Pueblos realizado en Viena, en Austria, y organizado por entidades y movimientos sociales internacionales en el mes de mayo.
Las principales causas de la desforestación de la Amazonia son la presencia del latifundio pecuarista y el gran aumento de la producción de soja en la región.
Según estudios ambientales alrededor de 1,5 millón de hectáreas de selva – equivalente al mismo número de campos de fútbol – ya fue destruido para favorecer el cultivo del grano. De acuerdo con el Grinpis, los mismos productores están involucrados en actividades ilegales como la apropiación de tierras y explotación de trabajo esclavo .