Campesinos marchan en Paraguay
En rechazo "a las políticas contrarias a los intereses nacionales, implementadas por el gobierno de Nicanor", la Coordinación Nacional "Por un país para la mayoría" prepara una marcha en 10 departamentos
La Coordinación Nacional “Por un país para la mayoría” realizará hoy debates, movilizaciones y marchas de protesta en diez departamentos del país, en repudio a las políticas de Estado contrarias a los intereses nacionales implementadas por el Gobierno de Nicanor Duarte Frutos, y por los anteriores gobiernos "de turno".
La marcha recorrerá el Ministerio del Interior, donde harán un mitín para repudiar la aparición de civiles armados en varios departamentos. Los debates y movilizaciones se realizarán en Asunción, Concepción, San Pedro, Caaguazú, Canindeyú, Guairá, Itapúa, Misiones, Caazapá y Ñeembucú.
La Coordinación Nacional está integrada por la Federación Nacional Campesina (FNC), el Movimiento Popular Revolucionario Paraguay Pyahura (MPRPP), la Corriente Sindical Clasista (CSC), un sector de la Coordinadora Nacional de Organizaciones Populares – Movimiento Sin Techo (CONOP-MST), el Departamento Mujer de Paraguay Pyahura y las Asambleas Populares impulsadas por el MPRPP.
La protesta coincide con la celebración del tercer año de gestión del presidente Nicanor Duarte Frutos, al frente del país.
“El Gobierno actual y los anteriores han construido el subdesarrollo y extendido la pobreza en beneficio de una minoría, y han postergado las demandas y necesidades históricas de los sectores mayoritarios” expresa un documento dado a conocer por dicha coordinadora.
Sostiene que los sectores mayoritarios hoy viven “al límite de la supervivencia y en las condiciones de vida más intolerables, mientras una minoría ostenta ofensivamente sus riquezas con mansiones fastuosas, vehículos de lujo y demostraciones pomposas”.
El documento señala que hoy se cumple otro aniversario de la asunción de un Gobierno más de turno, que garantiza latifundios y leyes para una oligarquía, a costa del desempleo, represión y expoliación de la mayoría del pueblo. “Creemos que ante esta situación la única medida que resta al pueblo paraguayo es la de organizarnos y movilizarnos para marcar nuestro rumbo, el de las mayorías, hacia el desarrollo nacional”, sostiene.
Expresa que la crisis se está profundizando cada vez más en Paraguay, que “las demandas y propuestas de los diferentes sectores sociales no son oídas y, si acaso son coyunturalmente atendidas, solo buscan contener la presión social”. Afirma que, mientras, bajo el marco de la llamada “reforma del Estado” se aprieta el acelerador para la venta de los bienes públicos, buscando repartir los recursos estatales en medio de escandalosos hechos de corrupción.
Sostiene que no solo los miembros del Poder Ejecutivo son “los cuervos que se alimentan de los cadáveres de campesinos, obreros y sectores populares”; también el Parlamento Nacional “no es más que un mercado donde se compran y venden adhesiones, se negocian principios partidarios, se adecuan conciencias, se cambia de discurso al por mayor, y se venden los votos al menudeo”.
Refiere que el Poder Judicial es un instrumento más de la opresión a los pobres, “se mueve bajo el mismo engranaje de dinero y corrupción”. Expresa que por esto las cárceles están mayoritariamente pobladas de pobres, muchos de ellos sin fallos judiciales, mientras que quienes compran la “justicia”, o se amparan en sus fueros o el poder político, “siguen con sus fechorías sin que la justicia pueda alcanzarles”.