Bush y ALCA contra el rechazo popular
La presencia del presidente estadounidense George W. Bush en la IV Cumbre de los Jefes de Estado de las Américas llevó 40 mil personas a las calles de la ciudad argentina de Mar del Plata
El último viernes, 04, ciudadanos comunes juntaron sus voces de rechazo a Bush a del futbolista argentino Diego Maradona y del presidente venezolano Hugo Chávez. Según la prensa latinoamericana la concentración contó con la presencia de una variada gama de artistas, dirigentes sociales y militantes argentinos y del resto de América Latina, con Cuba - único país americano excluido de la cita presidencial - como delegación extranjera más numerosa.
La marcha dio comienzo tras la llegada del Expreso del Alba, tren que recorrió los 400 kilómetros que separan Buenos Aires de esta ciudad a orillas del Atlántico, y que llevó a bordo al futbolista Maradona, el dirigente indígena boliviano Evo Morales, el músico y cineasta bosnio Emir Kusturica, el cineasta argentino Tristán Bauer y otras 160 personalidades.
La marcha Anticumbre estuvo liderada por el ganador del Premio Nobel de la Paz, el argentino Adolfo Pérez Esquivel, y la líder de la agrupación de derechos humanos Madres de Plaza de Mayo, Hebe de Bonafini.
El presidente de Venezuela, Hugo Chávez, reiteró su propuesta de aportar 10 mil millones de dólares para crear un fondo que financie proyectos dirigidos a enfrentar el hambre y la pobreza en América Latina. En la Cumbre de las Américas, que finalizó este sábado, 05, Chávez hizo una propuesta concreta para paliar la situación de hambre que enfrentan al menos 40 millones de personas en el continente. El Jefe de Estado recordó que el tema de la lucha contra la pobreza formaba la agenda central de la cita hemisférica, pero comentó que la discusión se desvió hacia el tema del Área de Libre Comercio (ALCA), propuesta que recibió las críticas de los países integrantes del Mercado Común del Sur (Mercosur) y Venezuela.
La Cumbre de las Américas concluyó con un acuerdo que refleja las diferencias que existen en el continente sobre el Área de Libre Comercio de las Américas (ALCA). Las delegaciones de los 34 países optaron por incluir en el documento final las dos posturas encontradas sobre el tema y remitir la resolución de la discusión a un encuentro que tendrá lugar tras la reunión de la Ronda de Doha de la Organización Mundial del Comercio (OMC) que se celebrará en Hong Kong el próximo mes.
Para los movimientos sociales la IV Cumbre de las Américas concluyó con una derrota política del Presidente de Estados Unidos George W. Bush quién no logró respaldo para incluir una resolución a favor del ALCA. La Declaración final contiene dos posturas en pugna: una presentada por Panamá, pero originada en Estados Unidos, y que fue defendida por México. La posición contraria fue defendida por los países del MERCOSU más Venezuela.
La fórmula final establecida en la Declaración de Mar del Plata fue una salida de emergencia ante la polarización de posiciones y que suavizó las posturas tanto de Hugo Chávez que pretendía cavar en el balneario de Mar del Plata la "sepultura del ALCA" como la del presidente Vicente Fox que llegó a sugerir un ALCA sin el MERCOSUR.
Chávez, pidió sacar las palas para enterrar el "féretro del ALCA" y fue el mejor ejemplo de que los tiempos de una América del sur alineada tras Estados Unidos quedaron en los 90. "El debate como se dio del ALCA demuestra que el ALCA no acepta la democracia", dijo Chávez a reporteros. "El ALCA trae veneno, es una propuesta imperialista, anexionista y fundamentalista: si no estás con el ALCA estás contra mí".