Bolivia: la propiedad intelectual
La posición de Bolivia es en defensa de la biodiversidad y contraria al registro de patentes de plantas y de los conocimientos ancestrales
Uno de los temas que enfrenta a Bolivia con el Perú es la posición que cada país tiene frente al tema de la propiedad intelectual. Bolivia mantiene su oposición a la flexibilización de una norma de la Comunidad Andina (CAN) sobre propiedad intelectual, que Perú necesita para implementar su Tratado de Libre Comercio (TLC) con Estados Unidos.
La última reunión de la Comisión de Ministros de Comercio de la CAN, celebrada en Lima, Bolivia fue el único miembro andino que se opuso a la flexibilización de la decisión 486 de Régimen Común sobre Propiedad Industrial del bloque, que tiene muchas implicaciones.
Las empresas transnacionales están interesadas en extraer recursos naturales, registrar patentes e introducir productos genéticamente modificados para crear monopolios, sin respetar la diversidad biológica ni los derechos indígenas y de otros sectores de la población. Al modificar la decisión 486 las empresas pueden patentar lo que quieran, lo que limita la libre competencia y encarece los precios de los productos, como ocurre actualmente con algunos medicamentos. Tendrían mayor margen para reclamar propiedad intelectual sobre inventos y recursos genéticos. El apuro de las empresas privadas tiene que ver con que en el 2010 se tiene prevista la instalación definitiva del sistema ABS (Access and Benedit Sharing/Compartir el Acceso y los Beneficios) que regulará el acceso a los recursos genéticos y la compensación por las ventajas de su uso. Obligará a los países desarrollados a pagar por el uso de recursos genéticos por con fines comerciales y a compensar a los países en desarrollo y a los Pueblos Indígenas, quienes han manejado estos recursos naturales y genéticos durante miles de años.
El debate sobre la decisión 486 puede entenderse como una guerra no declarada contra la biodiversidad y la diversidad cultural en el escenario de la CAN.