Aval europeo a Argentina en pelea con Monsanto por harina soja
El gobierno de Argentina dijo el miércoles que recibió el aval de la Unión Europea (UE) frente al reclamo de la gigante estadounidense Monsanto, al reconocer el bloque que la empresa no tiene derecho de patente sobre la harina de soja
Se trata de un conflicto de larga data y que preocupa a productores del país sudamericano por eventuales pérdidas de negocios de exportación.
"La Dirección General de Mercado Interno de la UE confirma la interpretación del gobierno argentino que sostiene que la harina de soja derivada de semilla genéticamente modificada que se importa en la Unión Europea, no infringe la patente de la empresa Monsanto", dijo un informe oficial argentino.
Desde hace un año, la compañía de biotecnología Monsanto (MON.N: Cotización) viene demorando embarques de harina de soja argentina en puertos europeos por medio de presentaciones judiciales, con el argumento de que no se pagaron las regalías correspondientes por la tecnología Roundup Ready (RR).
La firma, una de las líderes en el sector de la modificación genética de semillas para hacerlas más resistentes a las pestes y a los herbicidas, no percibe ingresos por la soja RR en Argentina, donde nunca fue patentada y donde hay un importante mercado negro de semillas.
Por esto intenta cobrar las regalías en los países europeos donde sí tiene patente.
"La protección de la patente no puede extenderse a los productos derivados en los cuales la información genética es residual y no ejerce ya función genética", sostuvo la UE de acuerdo a un comunicado del Ministerio de Economía argentino.
"Esta interpretación de la UE (...) se suma a la decisión del gobierno italiano de no hacer lugar a las demandas de Monsanto. La determinación y estrategia de la defensa de los intereses de los productores argentinos está dando los resultados previstos", acotó.
Argentina es el tercer productor y exportador mundial de soja, detrás de Estados Unidos y Brasil, y es el mayor proveedor global de harina derivada de la oleaginosa.
Europa es su principal cliente y España es el país con mayor volumen de compras. Entre un 60 y un 70 por ciento de la harina de soja que compra España proviene de Argentina.
Hasta el momento, Monsanto logró que fueran detenidos cargamentos de harina de soja en España, Holanda, Inglaterra y Dinamarca, donde inició procesos judiciales.
Ante la iniciativa de Monsanto, el gobierno argentino pidió a la justicia en esos países intervenir como tercera parte en los procesos, argumentando que las acciones de la firma afectan al país.
(Con la colaboración de Hilary Burke y Karina Grazina).