Argentina: Córdoba: permiten desmontar hasta 70% para actividad ganadera
Devastación: se estima que suman más de tres millones las hectáreas susceptibles de ser intervenidas en el norte y noroeste provincial, donde se concentra la cría de ganado vacuno
Después de casi un año y medio de análisis y discusiones, la Provincia llegó finalmente a un acuerdo con el sector agropecuario para compatibilizar las actividades productivas con el uso racional de los recursos naturales. El convenio apunta principalmente a la actividad ganadera y a los desmontes en el norte y noroeste de la provincia.
El entendimiento, que fue suscripto ayer en la sede de la Agencia Córdoba Ambiente, permitirá que los productores ganaderos cuenten con una reglamentación que los obligará a respetar entre 30 y 40 por ciento de bosques nativos (el porcentaje mayor pertenece a las áreas naturales protegidas) ante un desmonte de tipo selectivo.
"Creemos en la ganadería bajo monte y estamos convencidos de su sustentabilidad para generar crecimiento económico", señaló el titular de la agencia ambiental, Sergio Nirich. En el horizonte, el funcionario anheló la reproducción del sistema silvopastoril, que compatibiliza la producción agropecuaria con el cuidado de las reservas forestales.
Impacto
El acuerdo, denominado "Términos de referencia para las intervenciones sobre el bosque nativo", es el primero a nivel nacional y regirá a partir de abril.
"Aunque esperamos ver reflejadas las ventajas en otoño o primavera, el verdadero impacto será dentro de dos o tres años", indicó Ricardo Osella, vicepresidente de Cartez, quien aclaró que el productor agropecuario "no es un asesino del medio ambiente".
Por su parte, Miguel Picat, de la Sociedad Rural de Jesús María, consideró que el acuerdo le da sustentabilidad al medio ambiente, a la producción y al esquema socioeconómico del productor.
Se estima que suman más de tres millones las hectáreas susceptibles de ser intervenidas en el norte y noroeste provincial, donde se concentra la cría de ganado vacuno. Según datos oficiales, en los últimos cinco años se han logrado proteger casi 84 mil hectáreas de superficie de bosque nativo bajo la figura de "reserva forestal intangible".
Pero también desapareció el 27,38 por ciento. Las principales causas fueron los cambios en el uso del suelo, la conversión de ecosistemas de bosque a la actividad agropecuaria y los incendios forestales (inclusive los siniestros "controlados").
"Ahora tenemos una herramienta para producir sin fuegos descontrolados y sin agresiones irremediables al medio ambiente", agregó Osella, quien participó de la firma del convenio junto a la ministra de Producción, Adriana Nazario; el secretario de Agricultura, Carlos Presas; Néstor Calero, de Coninagro; y representantes de las sociedades rurales de Jesús María, Deán Funes, Cruz del Eje y Villa Dolores.
Alianza
Nirich opinó que el acuerdo representa una bisagra y una alianza con el sector ganadero para generar un desarrollo sustentable. Por su parte, los dirigentes rurales desecharon la posibilidad de que se genere un desmonte masivo e irracional con las nuevas reglas de juego. "Esto no significa un total libertinaje para depredar el ambiente", aclaró José Manubens Calvet, titular de la Sociedad Rural del Oeste (Villa Dolores).
Además, productores y funcionarios coincidieron en que el convenio allana los trámites y permitirá desburocratizar la actividad. "El Estado ha usado la burocracia, pero las intervenciones se hicieron igual, y no del todo bien", dijo Nirich.
Con las nuevas condiciones, los productores ganaderos que planeen un desmonte de tipo selectivo deberán presentarse en la Agencia Córdoba Ambiente con su plan de trabajo, basado en la flamante documentación, y en un mes estará la autorización para los trabajos. Además, los exime del costo de un estudio de impacto ambiental, y también permite una suerte de "blanqueo" para aquellos que estaban en infracción, ya que podrán adecuarse a la normativa.
La reglamentación contempla que los desmontes selectivos y los aprovechamientos forestales de bosque nativo se autorizarán entre el 1º de abril y el 30 de noviembre de cada año, y prohíbe el uso de fuego para la eliminación de vegetales o el desmonte de tipo "químico". Además, contempla la formación de un consejo asesor, con la participación del Inta.
Daniel Alonso
ra.moc.roiretniledzoval@osnolad
La Voz del Interior, Internet, 23-2-05