La agonía de las lenguas nativas en Colombia
Un documento de la Unesco publicado en 2003 sobre la vitalidad de las lenguas explica los posibles grados en los que se pude clasificar cada una de ellas. Actualmente, el 41% se encuentra en estado de peligro, lo que quiere decir que solo los adultos mayores son los que la hablan.
Algunos adultos la conocen pero no la usan para comunicarse con los más jóvenes.
Este estado también se determina por la proporción de hablantes en la comunidad, dado que en la mayoría de los casos se evidencia un gran porcentaje de miembros que no hablan su lengua nativa. Varias de estas comunidades no tienen producciones nuevas o materiales educativos, lo que dificulta la enseñanza.
El 27,3% se encuentra en situación vulnerable, el estado menos crítico en los que se encuentran las lenguas nativas en Colombia. Aquí todavía los niños hablan la lengua, al igual que la mayoría de la población.
Y en los estados más graves (En peligro de extinción y situación crítica) los miembros más jóvenes pertenecen a la generación de adultos mayores, no usan a diario su lengua y solamente recuerdan una parte de esta.
A pesar de este escenario, el Ministerio de Cultura incentiva la producción de contenidos en lenguas nativas. Las de las comunidades Arhuacas, Wayuu y Misak son las de mejor situación y las que menos riesgo tienen de desaparecer.
Aquí encontrará la relación entre los habitantes de una comunidad respecto a los habitantes hablantes de la lengua nativa. Para poder ver el número exacto pase el cursor por cada barra (ver aquí)
Fuente: Semana