Dos, tres, muchas fábricas de celulosa. ¿Es ésa la nueva consigna?

Idioma Español
País Uruguay

"Preocupa que, a pesar de los reclamos realizados por organizaciones sociales y ambientales, aun no se haya generado un espacio para la evaluación de la superficie forestada hasta ahora y un balance de los costos y beneficios generados por la fábrica de UPM, la primera hasta ahora instalada en nuestro país."

El tema de la inversión extranjera vinculada a la instalación de nuevas fábricas de celulosa en nuestro país ha estado presente en la prensa de los últimos días.

 

Preocupa que, a pesar de los reclamos realizados por organizaciones sociales y ambientales, aun no se haya generado un espacio para la evaluación de la superficie forestada hasta ahora --forestación que está concentrada en algunos puntos del país y que es mucho más de un millón de hectáreas-- y un balance de los costos y beneficios generados por la fábrica de UPM, la primera hasta ahora instalada en nuestro país y que ya cuenta con dos años de funcionamiento.

 

Portucel: ¿quién da más?

 

En la prensa de los últimos días se ha podido seguir el "intercambio" entre el gobierno uruguayo y la empresa de celulosa Portucel para definir si ésta se instala o no en nuestro país. En un cruce de ofertas y exigencias, donde uno le pide al otro que se quede y éste responde “quizás, pero...”, lo que en realidad dice Portucel es “…depende”; depende de que me otorguen las ventajas que necesito para poder tener el mayor beneficio posible con el menor costo de inversión posible. Entre otras cosas, la exigencia de un puerto de aguas profundas. (1)

 

Portucel a su vez hace su juego con dos gobiernos -el de Uruguay y el de Brasil- y prolonga la incertidumbre acerca de su decisión definitiva sobre en cuál de los dos países se va a instalar. De esta manera, la empresa portuguesa se da el lujo de presionar a ambos gobiernos para ver cuál es capaz de darle mayores ventajas. El mejor postor “ganará” dos cosas: una fábrica de celulosa y el aumento del área cubierta con plantaciones de eucaliptos.

 

Interesa recordar el argumento utilizado en el año 2002 para justificar la instalación de una fábrica de celulosa: “la forestación ya está”. Con ese argumento se buscó convencer a la población de que la única opción posible era la instalación de fábricas de celulosa por parte de empresas extranjeras. Luego el argumento se transformó en el de “la fábrica ya está” y ahora necesita más forestación que esté cerca de su emplazamiento por un tema de costos. Al aumentar la cantidad de hectáreas forestadas, se volvió al punto inicial de “la forestación ya está”, para justificar la instalación de nuevas fábricas. (2) ¿No será hora de romper el círculo vicioso?

 

Más importante aún: ¿no será hora de hacer un balance serio sobre la única fábrica ya instalada (UPM) y sobre las hectáreas ya plantadas con eucaliptos y comparar los beneficios prometidos (empleo, desarrollo local) con la realidad actual del departamento de Río Negro -donde está instalada UPM- que entre otras cosas ostenta la mayor desocupación del país? (3)

 

Montes del Plata: desprestigiando el mecanismo de Evaluación de Impacto Ambiental

 

En febrero de este año la empresa Montes del Plata (consorcio formado por Stora Enso y Arauco) confirmó su intención de instalar una enorme fábrica de celulosa en Conchillas. A partir de entonces han ocurrido algunos hechos curiosos, que parecen apartarse de los procedimientos normales para la autorización de emprendimientos de este tipo.

 

Por un lado, el poder ejecutivo determinó que la nueva empresa heredaría la Zona Franca otorgada a Ence. Por otro lado, suponemos que algo similar ocurrió con el otorgamiento de la viabilidad de localización, ya que al día de hoy no se ha informado que la nueva empresa haya pedido esta autorización al MVOTMA. La Dirección Nacional de Medio Ambiente había dado la autorización en 2007 a la empresa Ence a localizarse en Conchillas de acuerdo al proyecto presentado por la empresa española (tanto en capacidad como en características). Sin embargo, nada se sabe aún de las características o capacidad de la empresa Montes del Plata. ¿Cómo es posible entonces que se apruebe su localización si no sabemos aún si comprende un puerto, si incluye una fábrica de químicos, si implica -además de la producción de celulosa- una planta de generación de energía?

 

Como parte de la Evaluación de Impacto Ambiental --que toda empresa de este tipo debe presentar ante el MVOTMA para ser autorizada a funcionar-- se presenta en primer lugar una Viabilidad Ambiental de la Localización y en segundo lugar un Estudio del Impacto Ambiental. (4)

 

Entonces, si se respetara la legislación ambiental de nuestro país, antes de dar la Autorización Ambiental al nuevo proyecto, el MVOTMA debe generar un espacio para darlo a conocer a la población (un período de manifiesto público del proyecto y una audiencia pública) “para que cualquier interesado pueda acceder a la vista del mismo y formular por escrito las apreciaciones que considere convenientes”. Que se sepa, aún no se han cumplido esos pasos.

 

Es por eso que llaman la atención las declaraciones de representantes de nuestro gobierno aquí y en el exterior diciendo que el proyecto de esta empresa ya está aprobado o que “solo falta ponerle el moño” al proyecto. Lo que esas declaraciones hacen es confirmar la triste hipótesis de que en nuestro país la Evaluación de Impacto Ambiental no es más que un mero formalismo (el “moño”) y que todo proyecto de este tipo ya está aprobado de antemano. (5)

 

UPM: informes sobre contaminación

 

En estos días la prensa informa de un documento argentino que refiere a contaminación por parte de UPM (ex-Botnia). Según el diario El País, el informe presentado por el secretario de medio ambiente argentino sostiene que hay “contaminación atmosférica” en la zona de UPM, “la que era indetectable” previo al funcionamiento de la fábrica.

 

Consultado sobre este informe, el director de la Dirección Nacional de Medio Ambiente dijo a El País que "el comentario lo da el fallo de la Corte de La Haya, que fue contundente ante la presentación que hizo cada país". Pero al mismo tiempo recordó que el tema del aire no está en el marco de la CARU y "por lo tanto no correspondía que La Haya se hubiera expedido". Agregó que monitorear si hay contaminación atmosférica tampoco es parte de la tarea del comité científico acordado por los presidentes Cristina Fernández de Kirchner y José Mujica para el control medioambiental del río Uruguay. (6)

 

Ante estos hechos, la reflexión que surge es que aunque no corresponda a la CARU el estudio de la totalidad de las emisiones aéreas de la fábrica UPM y a pesar que la Corte Internacional de La Haya no se pronunciara sobre el tema contaminación atmosférica, a los uruguayos SÍ nos importa y mucho saber cuáles son las emisiones de la fábrica, en qué cantidad se dan y qué afectaciones pueden llegar a tener en el ambiente y la gente.

 

Uruguay no cuenta con experiencia en el seguimiento y control de este tipo de fábricas y sabemos además que los recursos financieros y el personal disponible para estas tareas no son suficientes. Por esa razón deberíamos estar atentos a cualquier indicio de contaminación, sea uruguayo o argentino y tomarlo como un aporte a analizar seriamente. Evitemos acudir a revivir el conflicto uruguayos vs. argentinos cada vez que haya una mirada crítica a este emprendimiento.

 

Es importante poder valorar en forma objetiva cuáles fueron y son los costos ambientales, sociales, económicos y políticos de aceptar estos emprendimientos para recién después pensar en aprobar nuevos y cada vez más grandes proyectos celulósicos.

 

Notas:

 

1.- “Gobierno pedirá a Portucel que confirme radicación en el país”

 

2.- “Más empresas forestales desembarcarían en Uruguay”

 

3.- “Sin corte de rutas ni tribunales internacionales… Evaluemos los beneficios y costos de una mega-fábrica de celulosa”

 

4.- Reglamento de Evaluación del Impacto Ambiental

 

5.- “Reunión con Stora Enso en Europa para cerrar acuerdo”

 

6.- “Botnia: informe negativo argentino sin rigor científico, afirma Uruguay”

 

Fuente: Grupo Guayubira

Temas: Agronegocio

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