Amazonía: la deforestación acumulada en 2022 es la segunda peor en 15 años, señala Imazon
Datos del Sistema de Alerta de Deforestación (SAD) del Instituto del Hombre y del Medio Ambiente de la Amazonía (Imazon) indican que la selva amazónica brasileña perdió 10 mil km² de bosque entre enero y octubre de 2022, el equivalente a seis veces la ciudad de São Paulo.
Esta es la segunda peor marca que registra Imazon en 15 años, solo un 0,5% inferior al acumulado en el mismo periodo de 2021, cuando se batió el récord histórico. La entidad ambiental realiza este monitoreo desde 2008, utilizando imágenes satelitales.
El estado brasileño campeón en términos de destrucción fue Pará, que deforestó 351 km² en octubre, poco más de la mitad de lo registrado en todo el bioma. Imazon advierte que la deforestación ha invadido áreas protegidas en el estado, donde se encuentran siete de las diez unidades de conservación y cuatro de los diez territorios indígenas más deforestados en octubre.
El árbol símbolo de la Amazonía está amenazado
Casi la mitad de la deforestación registrada en Tierras Indígenas (TI) en la Amazonía ocurrió en la TI Apyterewa (Pará), habitada por 800 indígenas Parakanã. El pueblo es víctima de los acaparadores de tierras y de la expansión de la ganadería ilegal.
Además, la devastación se acerca al norte de Pará, donde se encuentra el bloque de áreas protegidas más grande del mundo. Entre ellas, la Selva Estadual de Paru, que ocupó el 5º lugar en el ranking de las unidades de conservación más deforestadas de la Amazonía brasileña.
El área local ganó repercusión internacional después de que una expedición apoyada por Imazon, en septiembre, encontró allí el árbol más grande de la Amazonía: un angelim rojo de 88,5 metros de altura y 9,9 metros de circunferencia. El árbol, símbolo de la Amazonía, está amenazado por el avance de los delitos ambientales.
Prácticas sostenibles en riesgo
"Es desesperante ver que la deforestación invade la Selva de Paru, una unidad de conservación que Imazon ayudó a crear y hace 16 años apoya su implementación", afirmó Jakeline Pereira, investigadora de Imazon y asesora en la Selva de Paru.
"Estamos viendo avanzar el acaparamiento de tierras y la minería ilegal en el territorio, poniendo en riesgo el extractivismo de la castaña de Brasil y el manejo forestal, prácticas sostenibles. Además del árbol más grande de la Amazonía, la Selva de Paru también tiene varias especies endémicas, como se llaman las que solo existen en una determinada región", dijo Pereira.
*Edición: Flávia Chacon y Rodrigo Durão Coelho
**Traducción: Isabela Gaia
Fuente: Brasil de Fato