Reflexiones de las Jornadas Movimiento indígena: resistencia y proyecto alternativo

En el marco de las Jornadas Latinoamericanas "Movimiento indígena: resistencia y proyecto alternativo" se discutieron los siguientes puntos que se presentan como material para seguir la reflexión

1. Los movimientos indígenas se han convertido en fuerzas sociales fundamentales de las luchas de los pueblos y naciones latinoamericanas resistiendo contra el sistema neoliberal que amenaza nuestras culturas y a nuestros pueblos. En algunos países del continente, los movimientos indígenas son las principales y más compactas fuerzas de movilización y resistencia frente al estado, a las elites económicas dominantes y la intromisión imperial; en otros países son fuerzas que complementan y enriquecen las luchas que otros sectores populares, urbano y rurales, despliegan por sus reivindicaciones. En todos los casos el movimiento indígena, organizado de múltiples maneras, se ha convertido en una fuerza imprescindible para transformar las injustas relaciones económicas y las excluyentes relaciones políticas que agobian a los pueblos latinoamericanos. Así como no puede haber ningún porvenir latinoamericano de democracia, justicia y desarrollo económico sin la presencia de los movimientos sociales indígenas, tampoco puede haber ninguna estrategia de transformación de las relaciones de dominación sin el protagonismo de los pueblos indígenas.

2. Los movimientos indígenas portan la memoria histórica de la resistencia y la autoorganización de siglos frente a la dominación colonial y la exclusión republicana. Su persistencia, su radicalidad y su lucidez nace de nuestras propias capacidades organizativas heredadas y reactualizadas y de su independencia frente a los estados que sólo han tomado en cuenta a los indígenas o para exterminarlos o para discriminarlos y manipularnos.

3. Los movimientos indígenas de América Latina reivindican la importancia de ocupar y participar en los distintos foros internacionales existentes que abordan los problemas indígenas a fin de hacer oír en ellos la voz autónoma de los indígenas y limitar las arbitrariedades que los gobiernos han decidido siempre sobre estos temas. Alertan, sin embargo, que el proceso de reconocimiento de derechos para los pueblos indígenas ha mostrado limitaciones, tanto en relación al contenido que aceptan los estados como en cuanto a sus posibilidades de ejercicio. Además de que el ordenamiento jurídico institucional tras la guerra contra Irak, está herido de muerte.

4. Los movimientos indígenas plantean la necesidad de levantar un internacionalismo indígena que permita crear vínculos internacionales entre los distintos pueblos indígenas de América Latina, a fin de permitir el intercambio de conocimientos, experiencias de lucha y, si es posible, construir capacidad de emprender acciones conjuntas en todo el continente.

5. Los movimientos Indígenas reivindican sus propios códigos culturales y políticos para:
• descolonizarse ideológicamente
• para afianzar modos de independencia política frente al Estado y los partidos políticos tradicionales
• para generar estructuras organizativas que cimenten un tipo de poder indígena contrapuesto y paralelo al poder estatal.

6. Los movimientos indígenas expresan la necesidad de construir espacios de poder, de autogobierno indígena, en base a las propias estructuras comunitarias urbano-rurales para desde ahí, expandir e irradiar su capacidad social de decidir. Dependiendo de la fuerza que tomen los distintos movimientos indígenas en cada país se ha visto la necesidad de:
• construir sistemas de deliberación indígena (parlamentos indígena)
• consolidar sistemas de autogobierno territorial, administración de justicia y funciones públicas autónomas (educación, salud, seguridad, etc.)
• preparar la “toma” del poder político entendido éste como una revolucionarización de las estructuras de gobierno adecuadas a nuevas prácticas de entender la política y de recuperar la gestión de lo público por la propia sociedad.
• El problema de la toma del poder no depende únicamente de la mayor fuerza que cada movimiento indígena tenga en cada país, pues hay movimientos como el zapatista en México, que no comparten este planteamiento.

6. Los movimientos indígenas expresan la necesidad de combinar de manera flexible distintas formas de lucha, legales y extralegales, tanto en el ámbito de las instituciones actualmente existentes como por fuera de ellas, en base a la autoorganización y la capacidad de movilización frente al Estado.

7. Dentro del movimiento indígena la voz de las mujeres no es siempre escuchada, pese a los esfuerzos que ellas despliegan en todos los ámbitos. Como producto de la discusión en las Jornadas surgieron los siguientes acuerdos:
• Las mujeres indígenas reclaman su derecho a la participación y reconocimiento a la igualdad dentro de las organizaciones y movimientos y consideran que la equidad en las relaciones de género debe ser un eje indispensable de la democracia popular incluyente, tomando en cuenta las posibilidades y condiciones de las mujeres.
• Recomiendan que se incluya en el programa del movimiento indígena como una demanda prioritaria el reconocimiento jurídico y la práctica normativa a la propiedad y copropiedad de la tierra de hombres y mujeres.
• Llaman a que los y las participantes en esta Jornada pongan en la práctica el ejemplo de la equidad de género en los diferentes espacios, empezando por nosotros mismos, en nuestras familias, comunidades y organizaciones.

8. Los movimientos indígenas manifiestan la necesidad de establecer alianzas con otros movimientos sociales urbanos y rurales, tanto para lograr el reconocimiento de sus derechos en aquellos lugares donde el movimientos indígena no es mayoritario, como para establecer rutas de acceso al poder político en base a un amplio frente contrahegemónico de fuerzas subalternas.

9. Una debilidad que afrontan los movimientos indígenas es la desunión y a veces la confrontación interna, que es aprovechada y alentada por las fuerzas contrainsurgentes para golpearlas. Sin embargo, es necesario abandonar cualquier pretensión homogeneizante en la comprensión de las luchas de los pueblos indígenas y conviene pensarlos como un mosaico de diversidades sociales dinámicas. Ni organización homogénea ni dispersión total.

10. Los movimientos indígenas han avanzado en su capacidad organizativa y de irradiación local y regional, sin embargo es necesario generar formas variadas de proyección de esa capacidad a niveles más amplios. Es decir, la tensión entre capacidad local de resistencia y dificultad para la proyección de horizontes globales es un tema de primer orden sobre el cual trabajar.

Ciudad Universitaria/ México-Tenochtitlan
30 de mayo de 2003

(*) Bolivia: Felipe Quispe (Confederación Sindical Única de Trabajadores Campesinos de Bolivia y Movimiento Indio Pachacutik), Félix Patzi (Universidad Mayor de San Andrés), Álvaro García (UMSA)

Colombia: Eder Sánchez (Asociación Nacional de Usuarios Campesinos),

Chile: José Naín (Consejo de Todas las Tierras), Víctor Toledo (Universidad Arcis), José María Bulnes (Universidad Arcis),

Ecuador: Felipe Burbano (FLACSO-Ecuador),

Guatemala: María Domingo (Mamá Maquín).

México: Alicia Barabas (Instituto Nacional de Antropología e Historia-Oaxaca), Miguel Bartolomé (INAH-Oaxaca), Ana Esther Ceceña (Instituto de Investigaciones Sociales de la Universidad Nacional Autónoma de México), Carlos de Jesús Alejandro (Asamblea Nacional Indígena por la Autonomía, UAM-X), Fabiola Escárzaga (Universidad Autónoma Metropolitana-Xochimilco), Guadalupe Espinoza Sauceda (Centro de Orientación y Apoyo a Pueblos Indios y UAM-X), Carlos Figueroa (Benemérita Universidad Autónoma de Puebla), Jorge Fuentes Morúa (UAM-Iztapalapa), Jacobo Alavez (FCPyS UNAM) Magdalena Gómez (Universidad Pedagógica Nacional), Raquel Gutiérrez (UNAM), Francisco López Bárcenas (COAPI, UAM-X), Cristina Oemichen (Instituto de Investigaciones Antropológicas, UNAM), Mercedes Olivera (Universidad Autónoma de Chiapas), Antonio Paoli (UAM-X), José Luis Piñeyro (UAM-Azcapotzalco), Adelfo Regino (Consejo Nacional Indígena), Martha Sánchez (Coordinadora Nacional de Mujeres Indígenas) Raquel Sosa (Centro de Estudios Latinoamericanos, FCPyS, UNAM), Sergio Tishler (BUAP), Pablo Yanes (FCPyS, UNAM).

Perú: Carmen Fernández Gálvez (Universidad Nacional del Centro), Juan José García Miranda (AFACSUP), Noemí López Domínguez (FDA, CNA),

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