En defensa de los territorios, contra la deuda, el saqueo y la contaminación
El pasado 11 de agosto se verificó un desplome electoral del gobierno de Macri y al día siguiente un desplome económico- financiero que demuestra el fracaso de un sistema extractivo de saqueo, contaminación y represión que se implementó en Argentina desde que fracasó el anterior modelo extractivo basado en la distribución de las ganancias de las commodities.
En el modelo que está fracasando se reemplazaron los ingresos extras que generaban las exportaciones de granos del agronegocio y la megaminería por endeudamiento externo privado primero y del FMI, luego. Para lograr el endeudamiento se salió del “cepo” y se pagó a los fondos buitres. Se planteó un ajuste con despidos a trabajadores estatales y persecución a luchadores sociales, se reprimieron huelgas y movilizaciones y se profundizó la criminalización de la protesta. Se eliminaron los controles a las importaciones y se redujeron las retenciones a las exportaciones de todos los productos. Eso generó un enorme aumento del precio de los alimentos, impactando a los sectores más vulnerables y concentrando aún más la riqueza de las elites.
También se produjo un gigantesco aumento en las tarifas de las empresas energéticas privatizadas. El gobierno llevó adelante la mercantilización de la energía intentando desarrollar todos los tipos de energía sin tener en cuenta el cambio climático, ni la seguridad de la población y favoreciendo la concentración del manejo energético en corporaciones multinacionales. El ejemplo más evidente fueron los negocios de parques eólicos que fueron usados por las empresas familiares del presidente para hacer negocios.
En nuestros territorios patagónicos asistimos a la mayor y más infame represión de los últimos tiempos contra el pueblo mapuche. La arbitraria detención del lonco Facundo Jones Huala y su viciado juicio y extradición a Chile, la desaparición y muerte de Santiago Maldonado y el impune asesinato de Rafael Nahuel son los casos más visibles de la tremenda persecución que sufrió el pueblo mapuche y en mucha menor medida los que nos oponemos al extractivismo. El gobierno nacional y los gobiernos provinciales intentaron hacer avanzar los proyectos de la central nuclear en Río Negro, las megarepresas en Santa Cruz y la megaminería y uranífera en la estepa chubutense y rionegrina. La mayoría de estos proyectos fueron frenados por una intensa movilización popular y otros están aún en disputa.
Frente a la embestida reaccionaria y antipopular de los gobiernos hubo respuesta en las calles que frenaron muchas de las iniciativas de Macri o marcaron avances de los intereses de los pueblos. Las marchas contra el dos por uno a los genocidas, las grandes concentraciones de trabajadores, los paros generales, las movilizaciones del movimiento feminista, el reclamo por la aparición de Santiago, el reclamo de justicia por Rafa Nahuel y por la libertad de Facundo Jones Huala y una movilización que marcó un punto de inflexión en el avance de la derecha en la Argentina, las concentraciones de diciembre del 17 contra la reforma jubilatoria. A partir de ahí el gobierno de Macri comenzó su decadencia primero política y luego económica que tuvo su desenlace el último domingo en las PASO.
En este escenario de desplome la respuesta del gobierno para la crisis generada por él mismo es lo que se está viviendo en Chubut. En la provincia vecina el Estado está paralizado, se desfinanció y no se pagan los sueldos a ningún empleado estatal, para pagar la deuda que tomó el gobierno. La solución planteada por el gobernador Arcioni y Macri es permitir el desarrollo de la megaminería en la provincia y en especial el proyecto de plata Navidad. La contestación de las asambleas y los gremios ha sido unificada y masiva en las calles. Exigen la normalización de los pagos a los trabajadores y el no a la mina. La respuesta es bien clara, NO ES NO.
La situación en Río Negro es muy similar. El endeudamiento en dólares del plan Castello es impagable luego de la devaluación del lunes 12 de agosto. El gobernador Weretilneck ya rechazó la posibilidad de dar el bono propuesto por Macri a los empleados estatales y un aumento salarial mayor a 9 por ciento. El futuro del proyecto Calcatreu está atado al proyecto Navidad de Chubut, ya que están en el mismo territorio y pertenecen a la misma empresa. En caso de activarse del lado chubutense nada impide que lo haga de este lado. Por otro lado, la gobernadora electa es claramente una impulsora de la megaminería, el saqueo y la contaminación.
Frente a esta situación desde Piuke alertamos a las comunidades, llamamos también a la organización y a la articulación en defensa de la Vida y de los Territorios. Generan las deudas provinciales y aparecen las mineras haciendo inversiones.
El Agua es de los Pueblos, no de las corporaciones.
No al saqueo y la contaminación.
No a la megaminería.
No al pago de la deuda.
NO ES NO.
Organización Ecologista Piuke