“El modelo transgénico es totalmente inviable”: Emmanuel González, científico de la UNAM
Científico mexicano alertó sobre crecientes riesgos y costos de la producción agroindustrial a partir de paquetes tecnológicos de semillas transgénicas. “Se ha confirmado que el flujo de transgenes de las variedades transgénicas hacia las variedades nativas es una realidad”.
Desde su trabajo en el Instituto de Ecología de la Universidad Autónoma de México, el científico Emmanuel González se ha dedicado a estudiar los impactos de la introducción de los cultivos transgénicos en México, específicamente del maíz. González posee doctorados en Filosofía y Biotecnología de la Universidad de Barcelona y forma parte de la Unión de Científicos Comprometidos con la Sociedad (UCCS). En entrevista con UNIVERSIDAD, el especialista alertó sobre los serios riesgos a la biodiversidad y salud que implican los cultivos transgénicos.
¿Qué significa el maíz en México, más allá del tema de la alimentación?
-Se ha confirmado por evidencia antropológica y biológica que México -y Mesoamérica- es el centro de origen y diversidad del maíz, las especies silvestres que precedieron a la diversidad actual del maíz fueron domesticadas por las comunidades antiguas campesinas indígenas que vivían en México.
Este diálogo y acompañamiento mutuo de las comunidades con el entorno biológico y geográfico desembocó en una de las manifestaciones más importantes de la cultura mesoamericana, como lo es la alimentación basada en el maíz.
México es centro de origen y diversidad de más del 15% de plantas cultivadas actualmente a nivel mundial, ello incluye el maíz, tomate, chiles, cacao, amaranto y variedades de calabaza. Hay estudios que han recabado la presencia del maíz en más de 600 platillos en todo el territorio, esta es la expresión de la importancia del maíz a nivel culinario. Desde el punto de vista cultural, simbólico y ritual, tiene una gran importancia.
Se han identificado hasta ahora 59 razas de maíz, y a su vez miles de variedades.
Lamentablemente, se ha visto en peligro la presencia de variedades nativas de maíz, a partir de la siembra de variedades que son económicamente más rentables. No hay que dejar de decir que una gran importancia del maíz para los pueblos originarios es el simbolismo ritual de los maíces.
Usted ha dicho que la presencia del maíz transgénico es un golpe a la biodiversidad. ¿Por qué?
-Porque la propuesta de sistema agrícola implica el uso de variedades homogéneas, híbridas convencionales, que podrían desplazar a las variedades nativas.
Por otro lado, el riesgo latente y documentado históricamente de la presencia de variedades de maíz transgénico en el territorio mexicano, de nuevo pone un riesgo extra a las variedades nativas por el llamado el flujo génico, es decir, que por la misma biología del maíz -que es una planta de fertilización abierta- se puede dispersar polen entre plantas. Un maíz nativo no distingue de un maíz transgénico, al mismo tiempo un maíz transgénico no controla el polen que se ha comprobado que puede llegar a alcanzar a las variedades nativas.
El concepto del principio precautorio significa que ante la ausencia de evidencia científica en torno a los riesgos ecológicos de biodiversidad, salud o a la ecología, debe actuarse con precaución desde las políticas agrarias, en el caso de México en torno al maíz. Sin embargo, ya se ha confirmado que el flujo de transgenes de las variedades transgénicas hacia las variedades nativas es una realidad.
Desde la perspectiva de la introducción y efectos del maíz transgénico, ¿qué significó el Tratado de Libre Comercio de América del Norte?
-Considerando que en México la cultura del maíz históricamente no tuvo el apoyo que debería, con la implementación del tratado en 1994 las barreras arancelarias se eliminan y con los años aumenta la cantidad de maíz que se importa desde Estados Unidos.
Existen dos tipos de cultivos transgénicos a nivel comercial. En primer lugar, al que se le ha incorporado la característica de tolerancia a herbicidas, principalmente al glifosato o Round Up, y el de resistencia a insectos que pueden llegar a ser plaga bajo las condiciones que se dan en Estados Unidos.
En el año 2001 el investigador mexicano, Ignacio Chapela, publica la presencia de secuencias transgénicas en variedades nativas en una zona donde históricamente se siembran variedades nativas, en el estado de Oaxaca. Esta noticia causó gran revuelo a nivel social y científico. Estudios posteriores del Laboratorio del Instituto de Ecología confirmaron que efectivamente hay presencia de secuencias transgénicas en el maíz.
Si a la magnitud de la importación de maíz desde Estados Unidos se le suma la introducción de cultivos transgénicos, ¿qué tan urgente es el rescate de las variedades autóctonas?
-En el contexto geopolítico actual de toda América y el mundo con el nuevo Presidente de Estados Unidos, que de entrada ha planteado incluso una anulación del Tratado de Libre Comercio, a partir de la visión de que no se beneficia la economía de Estados Unidos, es un tema muy actual.
El apoyo gubernamental a la agricultura del maíz en México ha sido muy poco, pero también muy enfocado a promover una agricultura industrializada del maíz, en zonas muy particulares.
¿A esa agricultura industrializada le es más conveniente la variedad transgénica?
-Productores agroindustriales también rechazan los cultivos transgénicos, desde una posición meramente económica. Las semillas e insumos del paquete tecnológico son más caras, entonces al final de cuentas desde el punto de vista del bolsillo, no conviene la agricultura con transgénicos.
Saliendo de México y enfocando el continente, y saliendo del maíz y pensando en las variedades de especies transgénicas que se han difundido -en Costa Rica hay varias-, ¿qué valoración hace de la realidad del continente? ¿Se maneja el tema de transgénicos con el debido cuidado?
-Cada vez hay más evidencia e intercambio de información sobre lo inviable que es el modelo agrobiotecnológico, que implica a las semillas transgénicas pero también el paquete tecnológico con insumos como herbicidas y fertilizantes. Es muy importante el control sobre la disponibilidad de semillas, ¿quién controla el acceso a las semillas?
Por otro lado, se han comprobado los efectos de los cultivos transgénicos a nivel de ecología, daños a la salud, contaminación del agua y suelo, afectación a otros cultivos y organismos en los ecosistemas agrícolas.
El modelo transgénico es totalmente inviable. Es un hecho histórico que después de 20 años de presencia de cultivos transgénicos y la promesa hecha por estas compañías de aliviar el hambre en el mundo, al día de hoy hay millones de personas en todo el mundo que padecen hambre, entonces esa promesa no se ha cumplido y no se va a cumplir, porque está cada vez más claro que no es un objetivo a cumplir.
Por otro lado, todo el modelo tecnológico que implican los cultivos transgénicos hacía otra promesa de que reduciría el uso de herbicidas. Hay estudios estadísticos históricos en Estados Unidos, en los que al contrario, el uso del principal herbicida que es el motor económico de las empresas semilleras y agrobiotecnológicas -el glifosato-, ha aumentado drásticamente a partir de la implementación de cultivos transgénicos. El uso del glifosato ha causado daños trasversales a la ecología, a la salud, y en este en particular es importante mencionar que hace poco fue clasificado como posiblemente cancerígeno.
JUEGOS GENÉTICOS González explicó la diferencia entre los OGM en general y los transgénicos. Detalló que, desde el punto de vista de la biología molecular, el OGM es cualquier organismo al cual se le ha insertado una secuencia genética externa. Cuando esa secuencia genética insertada no es perteneciente a la misma especie del organismo que se pretende modificar, entonces el producto resultante es un transgénico. Por ejemplo, la multinacional Del Monte creó una piña “rosada” al combinar la fruta con genes del naranjo dulce. El científico mexicano también explicó el concepto de las variedades cisgénicas, resultantes de la inserción de material genético de una variedad distinta de la misma planta. Ejemplificó ello con el hipotético caso de que se inserten genes de una variedad de maíz en otra. Añadió que se ha desarrollado “una nueva tecnología que implica la edición genómica de los organismos”, es decir, la modificación del genoma, la estructura genética de los organismos. Esta nueva técnica no implica la inserción de información genética, sino “la modificación del genoma utilizando herramientas moleculares”. |
Por Vinicio Chacón
@Vinicio_Chacon
25 de abril, 2017
Fuente: Semanario Universidad