Colombia: declaración de la Asamblea Nacional frente al ALCA y el tratado bilateral con Estados Unidos
Las organizaciones abajo firmantes a través de sus voceros y voceras en representación de las mayorías del pueblo colombiano y participantes de la Asamblea Nacional frente al Acuerdo bilateral y el ALCA, realizada el 21 de noviembre de 2003 en Bogotá, Colombia, frente a la decisión gubernamental del gobierno de Uribe Vélez de avanzar hacia la firma del ALCA y de un acuerdo bilateral con los Estados Unidos hacemos las siguientes consideraciones y exigencias
DECLARACIÓN
El país se encuentra frente a decisiones de magnitud incalculable. Los acuerdos de libre comercio se constituyen en una máxima instancia a la luz de los cuales se juzgará toda la conducta económica de una nación, obligan a todos los gobiernos futuros y otorgan más facultades y poderes a las transnacionales que a los ciudadanos del país. Los litigios que se presenten deberán resolverlos tribunales extranacionales, perdiéndose la soberanía judicial sobre los más importantes procesos económicos. Además de los notorios y graves perjuicios económicos que causan, imposibilitan la acción económica del Estado. Esto es evidente en las normas propuestas sobre inversión, comercio de servicios y compras gubernamentales que rebasan los acuerdos de la OMC y están actualmente en discusión en todo el mundo. Se busca especializarnos en productos tropicales sin mayor importancia, supeditar cualquier esfuerzo industrializador a los caprichos de la inversión extranjera y pauperizar a la población.
El proceso vivido es aún más grave si se recuerda que Colombia ha sido, en los últimos trece años, víctima de la apertura económica, que bajo la teoría del Consenso de Washington y en aplicación de las políticas de ajuste, disminuyó la capacidad económica del Estado, inició un acelerado proceso de desindustrialización, llevó a la pérdida de novecientos mil empleos y de ochocientas mil hectáreas antes dedicadas a la agricultura y entregó a la voracidad de las transnacionales numerosas e importantes empresas estatales. Todo ello agravado por la violencia generalizada que azota el país. Después de suscribir con el FMI bajo el chantaje de la deuda sucesivos acuerdos de carácter recesivo, nuestro país se encuentra en el peor momento de debilidad de los últimos cien años, con una balanza de pagos estructuralmente deficitaria, y se ve obligado, a pesar de que la deuda externa ya es gigantesca, a nuevos y onerosos endeudamientos.
Durante las negociaciones que el gobierno de Uribe Vélez ha adelantado para suscribir el tratado del Área de Libre Comercio de las Américas, ALCA, y ante su propósito de suscribir un tratado bilateral de libre comercio con Estados Unidos, los sectores afectados y la sociedad entera han expresado de muchas maneras su preocupación, su crítica y su oposición a lo que tan precipitadamente, de forma inconsulta y a través de un proceso muy poco transparente se pretende imponer al país:
1. Los trabajadores y trabajadoras del campo y la ciudad se preocupan porque ambos tratados encarnan la renuncia definitiva a la ampliación del mercado interno. De hecho, las políticas de ajuste que descargan el peso de la crisis sobre los trabajadores, han promovido la reducción de los costos laborales, el empobrecimiento generalizado, los despidos masivos y el aumento del desempleo y del sector informal tan golpeado en su derecho al trabajo. Esta oferta de trabajo a bajo costo es aprovechada para implantar la subcontratación y la tercerización, llevando a la violación de los derechos de asociación y negociación colectiva. Con estos tratados se agravarán estas tendencias
2. Las mujeres denuncian una degradación de las condiciones laborales, familiares, sociales y el , desplazamiento forzado donde son las principales victimas y como se agudizará aún más la feminización de la pobreza si se suscriben estos acuerdos.
3. Los productores agrarios han expresado de una u otra forma su rechazo a los acuerdos, como los cultivadores de caña, palma, papa, arroz, cereales y soya, pues saben que serán notoriamente perjudicados en tanto que los avicultores y lecheros dicen que no sobrevivirán; los caficultores afirman que la crisis que padecen hace más de una década se agravará. Las masas de campesinos ven amenazada la supervivencia de la economía campesina y advierten que se perderá la seguridad y soberanía alimentaria.
4. En el terreno industrial, las empresas farmacéuticas temen su desplazamiento por las multinacionales y la pequeña y mediana industria anota que no está preparada para la competencia. La imposición de un capitalismo salvaje destruirá el sector solidario.
5. Los productores, tanto de la industria como del campo, temen la profundización de la quiebra ante la avalancha de productos extranjeros que ingresará al país en la medida en que se implementen los tratados y también temen el estrechamiento del acceso al crédito en la medida en que se profundizará el carácter especulativo del sector financiero.
6. Los sectores de la salud consideran que las definiciones sobre propiedad intelectual implicarían un mayor deterioro de las condiciones para el acceso de los más pobres a este derecho.
7. Los profesionales denuncian el riesgo de ser desplazados por las firmas multinacionales de prestación de servicios y de ser sometidos a reglas de formación, ejercicio profesional y empleo que no responden a las necesidades e intereses nacionales como se vislumbra en el caso de la contaduría, la ingeniería civil y las profesiones de la salud.
8. Los defensores del medio ambiente denuncian el peligro del saqueo de la biodiversidad y el deterioro de los ecosistemas.
9. Los pueblos indígenas y de afrodescendientes denuncian desde ya el peligro que corren sus territorios y culturas ancestrales.
10. Todos los colombianos se preocupan por la mercantilización de la salud y la educación y la privatización de los servicios públicos que tendrían un efecto social devastador.
11. Los municipios se alarman al ver que se restringirán sus facultades en la asignación del presupuesto para compras estatales que favorezcan la producción nacional y ante el marchitamiento de las industrias locales.
Tan grave es la situación que aun los pocos estudios que entidades gubernamentales y la Comunidad Andina han hecho al respecto, revelan que la mayor parte de los sectores industriales serán gravemente afectados, que las importaciones aumentarán más que las exportaciones y que se perderán importantes ingresos fiscales como producto de la eliminación de aranceles. Del mismo modo, señalan que con el ALCA se perdería cualquier posibilidad de integración subregional, las exportaciones no se diversificarían y desaparecerían renglones enteros de la producción.
El país entero observa atónito cómo a pesar de estas quejas y voces el gobierno se limita a acatar los enfoques de Washington. A cada concesión gubernamental prosigue una nueva exigencia norteamericana. En el pasado inmediato Estados Unidos no toleró unos aranceles altos para iniciar las negociaciones, exigió la salida colombiana del Grupo de los 21 y la eliminación de mecanismos secundarios de protección como las franjas de precios y conminó al Estado colombiano a compensar a las multinacionales con las cuales tiene conflictos. Ha demostrado que no está dispuesto a hacer ninguna concesión en materia agrícola, que no someterá a las mesas de negociación su proteccionista política antidumping y que en las demás materias de negociación exigirá condiciones privilegiadas para sus multinacionales. El gobierno colombiano, sin embargo, no hace más que dar pruebas de obsecuencia. En las negociaciones multilaterales ni siquiera ha sido capaz de acompañar las posiciones críticas de otros gobiernos latinoamericanos.
Ante todo esto es necesario asumir una posición política diferente. Los tropiezos y contradicciones que ha tenido la firma de los tratados de libre comercio, demuestran que ellos obedecen no a la fatalidad de las leyes económicas sino a decisiones políticas adoptadas por los círculos gobernantes y presionadas por Estados Unidos, país que protege su economía y –utilizando su poderío económico y militar– impone sus condiciones. Es indispensable, por lo tanto, que la sociedad colombiana le haga saber al gobierno que otro es el mandato que formula la población. Existen otros caminos para fortalecer y diversificar los vínculos comerciales y económicos entre los países, y la ampliación de nuestros mercados internos, de manera que en lugar de una relación de supeditación a la política y la economía estadounidenses se logre una verdadera integración de América Latina con la economía mundial que cuente con la participación de los sectores populares y productivos y preserve la unidad latinoamericana, con mira a la cual iniciamos una gran consulta popular que involucre a todos los ciudadanos.
En consecuencia, por todas las razones anteriores y teniendo en cuenta los enormes daños que estos tratados implicarán para toda la nación, consideramos que el gobierno colombiano no debe suscribir el ALCA ni el acuerdo bilateral con los Estados Unidos.
Invitamos a todos los colombianos y colombianas, sobre los cuales indistintamente se cierne esta amenaza, a que por medio de sus organizaciones se unan a la posición de rechazo que hoy adoptamos y que representa la voz de la inmensa mayoría de nuestros compatriotas.
(*) SUSCRIBEN ESTA DECLARACIÓN:
RED COLOMBIANA DE ACCION FRENTE AL LIBRE COMERCIO Y EL ALCA – RECALCA
COMITÉ COLOMBIA DE LUCHA CONTRA EL ALCA Y EL TLC
CENTRAL UNITARIA DE TRABAJADORES DE COLOMBIA CUT COLOMBIA
CONFEDERACIÓN GENERAL DE TRABAJADORES DEMOCRÁTICOS CGTD
CONFEDERACIÓN DE TRABAJADORES DE COLOMBIA CTC
CONFEDERACIÓN DE PENSIONADOS DE COLOMBIA
CONSEJO CONSULTIVO LABORAL ANDINO
MESA DE TRABAJO MUJER Y ECONOMIA
COORDINACIÓN DE MUJERES TRABAJADORAS ANDINAS COMUANDE
ASOCIACIÓN NACIONAL DE MUJERES INDÍGENAS Y CAMPESINAS DE COLOMBIA ANMUCIC
IGTN- RED INTERNACIONAL DEL GENERO Y COMERCIO PUESTO FOCAL COLOMBIA
MOVIMIENTO POPULAR DE MUJERES MPM
MESA NACIONAL DE CONCERTACIÓN DE MUJERES
SINDICATO DE MADRES COMUNITARIAS
FEDERACIÓN NACIONAL DE CONCEJALES
SOCIEDAD COLOMBIANA DE ECONOMISTAS
ONIC
PROCESO DE COMUNIDADES NEGRAS
ASOCIACIÓN DE VOCALES DE CONTROL SOCIAL DE LOS SERVICIOS PUBLICOS
SALVACIÓN NACIONAL AGROPECUARIA
ANUC
ANUC -UR
CAMPESINOS DE SIACHOQUE
SINDICATO DE PEQUEÑOS AGRICULTORES DE CUNDINAMARCA
ASOCIACIÓN AGROPECUARIA BARAY HUILA
FEDERACIÓN COLOMBIANA DE EDUCADORES FECODE
ORGANIZACIÓN COLOMBIANA DE PENSIONADOS O.C.P.
SINDICATO DE TRABAJADORES DE LA EMPRESA DE TELECOMUNICACIONES DE BOGOTA SINTRATELEFONOS
SINTRASEGURIDAD SOCIAL
SINTRAISS
FENASIBANCOL
ASOCIACIÓN NACIONAL DE TRABAJADORES DE LA SALUD ANTHOC
SINDICATO NAL DE TRABAJADORES DE LOS SERVICIOS SINTRAEMSDES
ASOCIACIÓN NACIONAL DE PROFESORES UNIVERSITARIOS ASPU
UNION NACIONAL DE EMPLEADOS BANCARIOS UNEB
ASOCIACIÓN DE EMPLEADOS BANCARIOS -ACEB
UNION SINDICAL DE TRABAJADORES DE LAS TELECOMUNCICACIONES USTC
SINTRABANCOL
ASFUCANDES
SINALTRABAVARIA
ASCONTROL
SINTRAGOBERNACIONES
SINTRADIAN
SINTRAOLIMPICA,
ADEC ASOCIACIÓN DE EDUCADORES DE CUNDINAMARCA
ANEBRE
ADEM
FANAL
SINTRAIME
SINTRAOLIMPICA
SINDISTRITALES
SINAL
SINTRAMETAL
ASOAGRO
LIGA DE USUARIOS DE LOS SERVICIOS PUBLICOS DE MANIZALEZ
ASOCIACIÓN DE USUARIOS DE LOS SERVICIOS PUBLICOS DE HUILA
ANTIALCA – UNIVERSIDAD TADEO LOZANO
CUT BOGOTA-CUNDINAMARCA, HUILA
FUNDACIÓN ORIENTACIÓN ECOLÓGICA
FUNDACIÓN JÓVENES CONSTRUYENDO FUTURO CGTD
COMITÉ DISTRITAL DE VENDEDORES AMBULANTES Y ESTACIONARIOS
SINUCOM-
COMITÉ ESTUDIANTIL DEL SENA
MESA DE TRABAJO DE SICOLOGÍA DE LA UNIVERSIDAD SUR COLOMBIANA
ASOCIACIÓN DE PROFESORES UDEA MEDELLIN
INSTITUTO LATINOAMERICANO DE SERVICIOS LEGALES ALTERNATIVOS ILSA
PLATAFORMA COLOMBIANA DERECHOS HUMANOS DEMOCRACIA Y DESARROLLO
CONFEDERACIÓN DE PROFESIONALES DE LA SALUD COPSA
BRIGADAS ANTI IMPERIALISTAS
ASOCIACIÓN DE ESTUDIANTES DE SECUNDARIA
ASOCIACIÓN COLOMBIANA DE ESTUDIANTES UNIVERSITARIOS
CORPORACIÓN REINICIAR –ASAMBLEA PERMANENTE DE LA SOCIEDAD CIVIL POR LA PAZ.
PERIODICO VOZ
COLECTIVO PERIODICO DESDE ABAJO
CEDETRABAJO
CIRCULO DE PERIODISTAS DE CALI
COMITÉ DE ENLACE -UNI COLOMBIA
REVISTA REGENERACIÓN
NUEVA GACETA
PARTIDOS Y MOVIMIENTOS POLÍTICOS:
PARTIDO LIBERAL
POLO DEMOCRATICO
MOVIMIENTO FRENTE SOCIAL Y POLITICO
PARTIDO UNIDAD DEMOCRATICA
MOVIMIENTO OBRERO INDEPENDIENTE REVOLUCIONARIO MOIR
PARTIDO DEL TRABAJO DE COLOMBIA P.T.C.
MOVIMIENTO CIUDADANO
PARTIDO COMUNISTA COLOMBIANO
CORRIENTE SOCIAL FSP
MOVIMIENTO POR LOS DERECHOS DEL PUEBLO
COLECTIVO GUILLERMO MARIN
JUPA Juventud patriótica
JUCO Juventud comunista colombiana
AMILKAR ACOSTA Ex Senador de la República
FRANCISCO ROJAS BIRRY Senador de la República
JORGE ENRIQUE ROBLEDO Senador de la República
LUIS CARLOS AVELLANEDA Senador de la República
CARLOS GAVIRIA Senador de la República
BERNARDO HOYOS Senador de la República
JESÚS BERNAL Senador de la República
WILSON BORJA Representante a la Cámara
ALEXANDER LOPEZ Representante a la Cámara