22 de Marzo: Día mundial del agua
"Los antiguos pobladores nos enseñan que los ríos y arroyos se asemejan a las venas y arterias de nuestro cuerpo. Cuando éstas se taponan, cambian de velocidad, se hacen lentas, el cuerpo se resiente, se enferma y muere. Con los territorios que bañan nuestros ríos pasa lo mismo, cuando se construyen represas o se impone una barrera al curso natural del agua, que lo hace más lento. Algo muy similar ocurre con las napas y ríos subterráneos. El agua que el suelo absorbe, circula en pozos, aljibes, ríos, napas y acuíferos, siempre circula, mientras se va depurando, de modo que cuando se hace vertiente o manantial, lo hace como agua potable, limpia, sana y natural".
Les propongo conocer más sobre el agua, para aprender a cuidarla y mejorar su uso.
El ciclo del agua, o los caminos que sigue es un continuo movimiento. El agua no para! Sólo se detiene de a ratos para luego seguir su curso.
Siempre tuvimos, tenemos y tendremos la misma cantidad de agua circulando en nuestro planeta Tierra. Entonces es bueno saber cómo hace la Naturaleza para transformar el agua servida en agua potable, el agua salada en agua dulce, el agua contaminada en agua pura.
Formación de agua potable
Insisto en que el nuestro es un Planeta VIVO. Vivimos en la GAIA.
Hay muchos mecanismos que usa la naturaleza para potabilizar el agua dentro de la GAIA.
Uno de ellos es la evaporación, es decir, la transformación del agua líquida en vapor de agua. Esto ocurre a través de los procesos de transpiración de las plantas y otros y de la evaporación directa. Se desprende vapor de agua que luego se condensa en la atmósfera, una parte se transforma en nube y cae como lluvia, nieve o granizo. El agua se evapora sola, sin componentes, y de esa manera vuelve a ser agua limpia y pura, agua destilada. Todo el resto de sustancias que estaban disueltas, quedan donde estaban.
Es importante profundizar los conocimientos sobre este proceso natural de potabilización del agua que usa la Tierra, porque algún día la vamos a usar más masivamente.
Otro de los mecanismos de purificación del agua es a través de la circulación del agua, mientras roza con arena, piedras, tierra, plantas, etc.; el agua se va limpiando, purificando, cargando de energía, oxigenando. Cuando la corriente cambia de velocidad, se hace lenta o se detiene, el agua se ensucia, se enferma, pierde energía, pierde oxígeno, cambia su composición y todas sus propiedades.
En latitudes cálidas, el agua estancada se puede transformar en un caldo de cultivo, dónde crecen muchos vectores de enfermedades, gérmenes, parásitos y otros precursores de afecciones como el dengue. Esto es lo que ocurre en las aguas estancadas en las represas en Misiones, Paraguay, Brasil y el Mundo entero.
Los antiguos pobladores nos enseñan que los ríos y arroyos se asemejan a las venas y arterias de nuestro cuerpo. Cuando éstas se taponan, cambian de velocidad, se hacen lentas, el cuerpo se resiente, se enferma y muere. Con los territorios que bañan nuestros ríos pasa lo mismo, cuando se construyen represas o se impone una barrera al curso natural del agua, que lo hace más lento.
Algo muy similar ocurre con las napas y ríos subterráneos. El agua que el suelo absorbe, circula en pozos, aljibes, ríos, napas y acuíferos, siempre circula, mientras se va depurando, de modo que cuando se hace vertiente o manantial, lo hace como agua potable, limpia, sana y natural.
También hay plantas purificadoras de agua, pero sus mecanismos no son tan conocidos.
El hombre prefiere potabilizar el agua, que no es lo mismo que consumirla potable, según los mecanismos naturales. Por ejemplo, en Buenos Aires hay que limpiar el agua centrifugando y agregando químicos para potabilizarla. Eso no es agua pura.
El deshielo es otro mecanismo que utiliza la Naturaleza para ofrecernos agua potable. El Cambio Climático atenta en contra de este reservorio de agua dulce ya que no permite que una cantidad suficiente de agua se mantenga congelada en forma de hielo o nieve, y aislada de contaminantes. Estos reservorios de agua, al derretirse proveen agua potable.
Los árboles, el monte, y las plantas en general juegan un rol fundamental en el ciclo del agua. Las raíces de las plantas son verdaderos caminos para que el agua pueda ganar el subsuelo y alimentarlo, acumulándose en napas, pozos, ríos subterráneos, acuíferos, y permitiendo la recarga de éstos, entre otras vías.
Los arroyos, ríos, lagos y lagunas se comunican con el agua subterránea, siempre circulando. Recordemos que agua estancada es agua enferma.
Los mares, ríos y otros cursos de agua son reservorios de lo que usamos y tiramos. Al agua van a parar TODOS nuestros desechos y se distribuyen en todo el Planeta, porque el agua comunica el mundo entero. Por eso cuando fabricamos venenos llegan a TODOS los rincones de este ecosistema, como dice el refrán: “no se salva nadie”.
La propuesta no es no fumigar, es no fabricar agrotóxicos y venenos.
Quiero recalcar que debemos respetar el ciclo del agua, la circulación del agua debe ser libre, sin barreras, sin obstáculos, sin maltrato, sin contaminantes.
Juan Yahdjian, médico ambientalista. Buenos Aires, 22 de marzo 2020
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