Tres acciones que requieren apoyo internacional
Gabón se enfrenta a una expansión alarmante de las plantaciones de palma aceitera y caucho. Los pueblos indígenas y campesinos del Sur de Filipinas, están luchando contra el acaparamiento de tierras que resulta de una plantación de palma aceitera. Organizaciones brasileras denuncian la certificación FSC de monocultivos de árboles de Fibria Celulose SA.
Quisiéramos invitarlos a adherir a tres acciones que requieren apoyo internacional.
La primera viene de Gabón. Como muchos países de África, Gabón se enfrenta a una expansión alarmante de las plantaciones de palma aceitera y caucho. El gobierno ha dado a la compañía singapurense Olam 300.000 hectáreas de tierras para realizar plantaciones industriales de árboles. Las comunidades locales no han sido consultadas sobre este proceso, y han exhortado al gobierno a respetar sus derechos, enviándole una carta en la que expresan sus preocupaciones. ¡Las reclamaciones de las comunidades requieren apoyo internacional!
La segunda proviene de Filipinas. Los pueblos indígenas (Higaonons) y campesinos de Opol, Misamisi Oriental, Sur de Filipinas, están luchando contra el acaparamiento de tierras que resulta de una plantación de palma aceitera, promovida por la A. Brown Company Inc. (ABCI). Desde el inicio de las operaciones de la plantación, los Higaonons y otros aldeanos están experimentando graves violaciones de los derechos humanos, como expulsiones forzosas, arrestos ilegales, disparos desde vuelos rasantes y hostigamiento. Las aldeas afectadas llamaron al gobierno filipino a detener el acaparamiento de tierras y a respetar los derechos humanos. Necesitan apoyo internacional La tercera viene de Brasil. Las organizaciones de la sociedad civil están denunciando, la certificación FSC de los monocultivos de árboles de Fibria Celulose SA, realizada por IMAFLORA, un organismo de certificación brasileño. Las reclamaciones de dichas organizaciones apuntan a apoyar la batalla social y ambiental de las poblaciones que sufren los efectos de los proyectos de fábricas de celulosa y, en este caso en particular, los de la firma Fibria (ex Aracruz Celulose).
Para apoyar esas tres acciones, sírvanse ingresar aquí
Finalmente, si aún no han firmado la carta que denuncia la financierización de la naturaleza, todavía pueden hacerlo aquí
¡Gracias desde ya!
El equipo del WRM