Firma para solicitar el regreso de Gustavo Castro Soto a México

Las autoridades hondureñas emitieron una alerta migratoria por 30 días al ambientalista Gustavo Castro Soto negando sus derechos como víctima del asesinato de Bertha Cáceres y los beneficios que supone el Tratado sobre Asistencia Jurídica Mutua en Materia Penal firmado por México y Honduras.

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CARTA

A Juan Orlando Hernández
Presidente de Honduras.

Sr. Jorge Alberto Rivera Avilés
Presidente de la Corte de Justicia de Honduras.

Abog. Oscar Fernando Chinchilla
Presidente de la Fiscalía.

Sr. Roberto Herrera Cáceres
Comisionado Nacional de los Derechos Humanos de Honduras.

México, a 16 de marzo 2016

P R E S E N T E S

Con la presente externamos nuestra profunda preocupación por las condiciones en las que se encuentra el reconocido ambientalista mexicano Gustavo Castro Soto, único testigo ocular y sobreviviente del atentado que costó la vida de la compañera Berta Cáceres, en el poblado de La Esperanza, Honduras, el pasado día 3 de Marzo del presente año.

Sabemos que Gustavo Castro se encuentra estos días en la Embajada de México en Honduras debido a la alerta migratoria de 30 días que fue emitida por el Juzgado de Letras Primero del Departamento de Intibuca el día 7 de Marzo. Sin embargo, sabemos también de la existencia del TRATADO SOBRE ASISTENCIA JURIDICA MUTUA EN MATERIA PENAL ENTRE LOS ESTADOS UNIDOS MEXICANOS Y LA REPUBLICA DE HONDURAS, que garantiza la posibilidad de que Gustavo Castro en su calidad de víctima y testigo siga rindiendo sus declaraciones en México.

Sabemos igualmente que a pesar de las heridas que él mismo recibió por parte de los sicarios y del impacto que el homicidio de Berta causaron en su salud física y psicológica, Gustavo ha cooperado con todas las diligencias solicitadas por la fiscalía y por la los órganos jurisdiccionales.

Quienes suscribimos esta carta reconocemos en él a un defensor más de los derechos humanos y de la naturaleza, víctima de la violencia ejercida hacia quienes denuncian y protegen a las comunidades indígenas y campesinas de Latinoamérica. Por su labor de defensor y su calidad de víctima de un atentado solicitamos a las autoridades hondureñas lo siguiente:

• Primero.- Otorgar a Gustavo Castro los beneficios que supone el Tratado sobre Asistencia Jurídica Mutua en Materia Penal firmado por México y Honduras, y que se le otorgue el beneficio de la Ley de Protección de Testigos en el Proceso Penal de Honduras que indica el resguardo de su integridad física y psicológica, saliendo del país.
• Segundo.- Que la Fiscalía General retire la petición a los órganos jurisdiccionales para mantener una alerta migratoria que lo tiene retenido en Honduras y pueda regresar a México.
• Tercero.- Que la Corte Suprema reconozca que la medida adoptada para reternerlo en el país constituye una detención ilegal y emita un fallo a favor del levantamiento de las medidas migratorias, para su retorno a México de acuerdo a los más altos estándares de protección internacional de los derechos humanos.
• Cuarto.- La protección y garantía de seguridad para él, sus abogados, su familia y sus colaboradores en de las acciones sostenidas para su defensa, acompañamiento y retorno a México.

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