Panamá: día de acción contra represas rechaza necesidad de 85 nuevas hidroeléctricas

Por ADITAL
Idioma Español
País Panamá

Desde 1997, el 14 de marzo de cada año es celebrado el Día de Acción contra las Represas y en Defensa de los Ríos, del Agua y de la Vida. Este año, para marcar la fecha, la red Nacional Anti-represas realizó hoy (15) una protesta pacífica en contra de las centenas de concesiones hidroeléctricas y a favor de los ríos panameños

La movilización fue realizada frente a la Autoridad Nacional de Servicios Públicos (ASEP), ya que el órgano autorizó la construcción de 33 hidroeléctricas y 14 centrales de generación térmica. Al mismo tiempo que nuevas están siendo iniciadas más de 52 están en proceso de aprobación. Lo que significa que hasta 2015, Panamá podrá estar cercada por 85 hidroeléctricas.

La Red Anti-represas cuestiona la necesidad de esas inversiones, ya que las actuales hidroeléctricas generan energía suficiente para todas las zonas electrificadas del país. Con la gran cantidad de autorizaciones innecesarias, queda evidente que las nuevas hidroeléctricas no están dirigidas a atender las necesidades futuras de la población panameña, más bien son para abastecer de energía al mercado regional, ya que a partir del 2012, Panamá pretende operar una línea de 300 mega-watts (KV)

Panamá es hoy el país con mayor número de proyectos hidroeléctricos de la región centroamericana. Según constatación de la Red Anti-represas, esto se da no solo por el potencial generador de energía del país, también por cuenta de los grandes incentivos entregados a los empresarios del sector, que consiguen financiamiento internacional sin dificultades por estar "invirtiendo en energía limpia".

Como resultado de todo ese desarrollo, cientos de campesinos serán desalojados de sus tierras, lo que podrá generar incremento de violencia y migración para las ciudades. El volumen de agua disminuirá, casi secando los ríos. La fauna y flora también serán afectadas, así como la actividad de pesca de subsistencia. Las poblaciones que quedaren en sus tierras tendrán poco espacio para plantar, además que sus casas correrán el riesgo de ser inundadas.

Otros perjuicios inmediatos son el límite de acceso al río, contaminación de aguas por dióxido de carbono y metano originados de la descomposición de la materia orgánica inundada, contaminación y consecuente disminución de la cualidad del aire, además de la proliferación de enfermedades como disentería, malaria, fiebre amarrilla y dengue.

Por la gran cantidad de efectos negativos, la Red Nacional Anti represas exige una serie de demandas a respeto a los derechos de la población panameña. Una de las medidas de primera necesidad es una moratoria sobre todos los proyectos hidroeléctricos del país para que sea iniciada la discusión de un Plan Energético para el país. Otra demanda es la realización de un "Estudio General de las Cuencas".

También es solicitado que sean suspensos los incentivos fiscales a las empresas del ramo energético y modificado el artículo 14 del Decreto 59 de Marzo de 2000, que da a los empresarios el poder de decidir la intensidad de los efectos de la obra. Las demandas terminan con un pedido de que la población sea respetada y consultada antes de la construcción de grandes inversiones, como las hidroeléctricas.

Adital, Internet, 15-3-10

Comentarios