Monsanto gana disputa en Europa
La EPA confirmó una controvertida patente de soja transgénica, concedida en 1996 al consorcio Monsanto, contra la que había presentado recurso la organización ecologista Greenpeace
(EFE) - La Oficina Europea de Patentes (EPA), con sede en Múnich (Alemania), confirmó hoy una controvertida patente de soja transgénica, concedida en 1996 al consorcio Monsanto (EE.UU.), contra la que había presentado recurso una organización ecologista.
El grupo ambientalista Greenpeace había argumentado que la legislación no permitía patentar especies particulares.
Según la EPA, en cambio, la patente "EP 546090" se refiere a toda una gama de plantas transgénicas y por lo tanto es lícita.
La patente se aplica a brotes de soja y otras plantas sometidas a una modificación genética para que sean resistentes al herbicida Roundup, que fabrica Monsanto.
Greenpeace acusa a los grandes consorcios semilleros de usar sus patentes para favorecer el avance de los transgénicos en el mercado.
En Argentina se ha convertido en algo imposible conseguir semillas libres de manipulación genética, señaló el presidente de la Federación Agraria Argentina, Eduardo Buzzi, quien acudió a Múnich para advertir sobre los riesgos del avance de las patentes a productos vegetales.
En 2000, el comité de recursos de la EPA rechazó las quejas en primera instancia, y ahora tenía que pronunciarse en segunda instancia.
El experto del "Grupo de Trabajo Agricultura Campesina" Mute Schimpf, quien acompañó al experto en patente de Greenpeace, Christoph Then en Múnich para insistir en sus denuncias contra Monsanto, señaló que la patente se aplica a células vegetales, a los vegetales mismos, a las semillas y a la cosecha, lo que obliga a los agricultores a depender de Monsanto.
Además, con los amplios derechos que concede la patente al consorcio se despoja a los agricultores del derecho secular a quedarse con una pequeña parte de la cosecha para guardar las semillas y utilizarlas para la próxima, criticó.
Infobae, Internet, 7-4-05