Biocombustibles. Soberanía alimentaria en riesgo
El desarrollo de los biocombustibles y una agricultura sustentable. Alimentos o energía es un dilema que ha emergido con los megaproyectos de biocombustibles a partir de diferentes cultivos. Impacto ecológico y consumo de petróleo
Por Sebastian Premici
Miguel Altieri, profesor de la Universidad de Berkeley y miembro fundador de la Sociedad Latinoamericana de Agroecología, disertó en el seminario “Avances y retrocesos en la sostenibilidad de la agricultura latinoamericana”. El encuentro –realizado el pasado 21 de marzo– fue organizado por el Instituto Argentino para el Desarrollo Económico y el Grupo de Ecología del Paisaje y Medio Ambiente de la Universidad de Buenos Aires. “Hay que entender que la demanda de energía alternativa para Estados Unidos constituye un esfuerzo por independizarse del petróleo que viene de zonas políticamente complicadas. Por un lado, apuestan a la energía nuclear, que están desarrollando fuertemente pero en silencio, y por el otro a los biocombustibles”, explicó Altieri a Cash.
¿Alimentos o energía es una cuestión preocupante?
–Estados Unidos es un gran productor de etanol. Por eso tiene problemas en Dakota e Iowa donde deben importar maíz para alimentar a su ganado ya que todo lo que producen es destinado al etanol. La consecuencia directa sobre los consumidores será la pérdida de la soberanía alimentaria y el aumento de los costos de los alimentos, tal cual ocurre en México con el precio de la tortilla. Sin embargo, si todas las hectáreas de maíz que hay en Estados Unidos se convirtiesen en biocombustible, sólo cubrirían el 12 por ciento del consumo del petróleo. Es decir que necesitarían el equivalente a seis áreas similares a las plantaciones de maíz para reemplazar el uso completo de la energía tradicional. Por eso están mirando al Sur, a Brasil (con el cultivo de caña) y a la Argentina (con la soja).
Así como Estados Unidos invadió Irak para obtener un mejor manejo del petróleo, ¿cree que habrá conflictos similares en Latinoamérica por el acceso a la tierra?
–El gobierno de Bush está intentando crear una especie de OPEP del etanol para detener la influencia de Chávez. La visita que realizó a Brasil fue en ese sentido. Pero los conflictos en la región ocurrirán más al interior de los países. En Estados Unidos ya hay problemas importantes en torno del agua porque el maíz se expande hacia fuentes hídricas. Por lo tanto, los conflictos serán por la soberanía alimentaria y por el impacto ecológico. A la deforestación hay que sumarle la alta escala de producción de los monocultivos, que requerirán la utilización de muchos herbicidas y maquinaria. La producción de energía a partir de los biocombustibles requerirá mayor consumo de petróleo. Por un litro de biocombustible producido, se necesitará 1,36 de petróleo. Por eso las empresas petroleras no se quejan de la energía alternativa ya que saben que necesitarán petróleo para producir etanol.
¿Los biocombustibles no solucionarán el problema del medio ambiente?
–En Estados Unidos llaman a esta situación green washed (lavado verde), es decir, cuando una empresa quiere vender la bondad de lo verde asociada a los biocombustibles. El problema energético debe solucionarse de la mano del autoconsumo. Europa y EE.UU. utilizan el 52 por ciento del petróleo del mundo. Entonces, claramente hay un grupo que es responsable del consumo y de las emisiones de dióxido de carbono que contaminan el medio ambiente. El sistema de transporte público de EE.UU. fue destruido para que haya un mayor crecimiento de la industria automotriz. No podemos pensar que las mismas multinacionales que trajeron los problemas climáticos nos van a librar de él.
¿Cómo imagina ese cambio?
–En la agricultura, muchas veces las pequeñas propiedades pueden ser hasta cien veces más productivas que las grandes. Todo lo que produce una pequeña finca, por ejemplo, pollos, vegetales, maíz resulta más productivo que una gran hacienda dedicada a un monocultivo. Las propiedades menores a las 200 hectáreas conservan mejor sus recursos naturales, utilizan menos pesticidas, aumentan la biodiversidad.
¿Habría que impulsar una reforma agraria?
–Una reforma agraria bien hecha sería relevante para generar una economía sustentable. Hay que pensar en un modelo de pequeña agricultura, ecológica y productiva.
Página 12, Argentina, 1-4-07