Argentina: buscan un acuerdo por las regalías sobre semillas
Mientras el Gobierno negocia con Monsanto, los exportadores locales rechazaron la amenaza de la compañía de frenar los embarques de soja transgénica argentina en el exterior, y le recomendaron alcanzar un acuerdo con los productores
La Secretaría de Agricultura y Monsanto negocian un acuerdo por el pago de regalías sobre semillas, que generó un duro cruce entre la multinacional y el titular de la cartera, Miguel Campos, mientras que los exportadores locales rechazaron la amenaza de la compañía de frenar los embarques de soja transgénica argentina en el exterior, y le recomendaron alcanzar un acuerdo con los productores.
Las negociaciones entre el titular de la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Pesca y Alimentos (Sagpya) y el presidente de la filial local de Monsanto, Alfonso Alba, se desarrollan con absoluta reserva, pero voceros de ambas partes señalaron a la agencia Télam que “se esperan novedades para los próximos días”.
RECHAZO. Más allá de que cada uno atribuyó al otro la iniciativa del encuentro para no aparecer cediendo posiciones luego de que la Secretaría calificara de “bravuconada” la amenaza de Monsanto de cobrar compulsivamente en el exterior 15 dólares por tonelada de soja transgénica producida en la Argentina, la cautela de los comentarios revela el interés por resguardar el ámbito de discusión.
Simultáneamente se supo que los exportadores rechazaron la amenaza de Monsanto de interferir la venta de la soja argentina en el exterior, frenando la descarga de los embarques en los puertos de destino.
El rechazo se plasmó mediante una nota dirigida a Jim Tobin, director del Desarrollos Biotecnológicos de la central empresaria con sede en Saint Louis, Missouri (Estados Unidos), en respuesta a la que ese directivo había cursado el 14 de marzo pasado a los operadores locales.
RESPUESTA. La nota de respuesta a Monsanto, a la que tuvo acceso Télam, está fechada el 1 del corriente y lleva la firma de los presidentes de la Cámara de la Industria Aceitera de la República Argentina (Ciara), Raúl Padilla, y del Centro de Exportadores de Cereales (CEC), Ciro Echesortu.
En la contestación, los exportadores advirtieron a la multinacional que “la propiedad de las cargas” de soja despachadas desde el país se transfieren al “momento de su exportación” a los importadores, por lo que, aunque pretendan perjudicar a los agricultores argentinos, al trabar la descarga de la mercadería están enfrentando a “la industria o consumidor final” del país de destino.
Asimismo señalaron que “no encuentran explicación al reclamo de 15 dólares por tonelada cuando de hecho han ofrecido a todas las partes un cargo royalties de 1 a 3 dólares por tonelada”.
ARGUMENTACIONES. Recordaron además a la multinacional que los exportadores a quienes cursó aviso de la maniobra que proyecta para cobrar en el exterior una patente que no tiene legalmente registrada en el país, “no representan a los productores agropecuarios”, por lo que le recomienda dirigirse a las asociaciones que los agrupan.
También puntualizaron que las exportaciones de granos generan “más del 30 % del ingreso de divisas del país”, por lo que si “eligen interrumpir el normal flujo de embarques” estarán “generando un daño a todo el sistema y no sólo a los productores agropecuarios”.
Por tales razones, los exportadores instaron al directivo de la casa central de Monsanto a reconsiderar la posición y continuar “las conversaciones con los productores y sus respectivas organizaciones” argentinas.
LLEGAR A ENTENDIMIENTO. Al respecto, el director ejecutivo de la Asociación de Semilleros Argentinos (ASA), Adolfo Mac, también comentó que resultaría “muy positivo” retomar las negociaciones “en un clima de mayor distensión”, sin “amenazas ni presiones que condicionen el entendimiento”.
El directivo recordó que “luego de un año de intenso trabajo”, se firmó un documento con los “lineamientos básicos” del acuerdo en diciembre de 2004, y cuando “estábamos discutiendo algunos ajustes”, se produjo el “exabrupto de Monsanto, con lo que todo volvió prácticamente a cero”.
Las conversaciones, aunque sea parcialmente, se reiniciaron cuando Campos recibió en su despacho al presidente de Monsanto Argentina.
El encuentro siguió a la reunión que el titular de la Sagpya mantuvo a fines de marzo en Cartagena de Indias, Colombia, con su par de Estados Unidos, Mike Johanns, y a la visita que el 12 del actual realizó al país la consultora del Departamento de Estado de ese país, Madelyn Spirnak, para evaluar, entre otros temas, la incidencia del conflicto de Monsanto en la alianza estratégica que ambos países mantienen en biotecnología agropecuaria.