Salvar millones de árboles en Tanzania

Todavía se ven jirafas y elefantes deambulando por la sabana, hipopótamos en las lagunas, leones en busca de presas por los pastos. En la Reserva de Caza de Selous, Patrimonio Mundial de la UNESCO, la vida late y al mismo tiempo está severamente amenazada.

Pero en la garganta de Stiegler en el río Rufiji, está prevista una represa que sería un desastre ecológico.

1.500 kilómetros cuadrados de bosques y sabanas quedarán inundarados en el embalse. Para llevar a cabo el proyecto, pretenden permitir la tala de 2,6 millones de árboles.

La represa en sí misma causará daños a los bosques del delta y a los manglares río abajo. 200.000 personas, especialmente agricultores y pescadores se verán afectados.

El consorcio egipcio de El Sawedy Electric y Arab Contractors concluyó en noviembre 2020 la primera parte de la construcción, tras haber puesto en julio 2019 la primera piedra y haber otorgado permisos de tala a 17 empresas de Tanzania. Junto al CRDB Bank Plc y al United Bank for Africa, participan en el proyecto de 3 mil millones de dólares el Africa Export-Import Bank (Afriexim Bank).

Ambientalistas se oponen al proyecto. Temen que se destruya el área protegida, ya dañada. Una  mina de uranio amenaza con destruir parte de la reserva. En 2014, UNESCO puso a Selous en la  Lista Mundial del Patrimonio Mundial en Peligro de Extinción.

El presidente Magufuli, quien falleció en marzo 2021, quería ser visto como un ejecutivo al que no le importan las críticas. Un miembro de su gobierno incluso amenazó con encarcelar a cualquiera que se oponga al proyecto.

La población y la economía de Tanzania necesitan energía. Pero el proyecto de la represa no es la solución y deberían cancelarlo. Por favor, firma la petición en defensa de la Reserva de Selous. 

¡No talen 2,6 millones de árboles para un proyecto sin sentido!

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Fuente: Salva la Selva