Brasileros son víctimas del calentamiento global
El documental Cambios del Clima, Cambios de Vidas revela, con opiniones de personas de las comunidades afectadas y análisis de científicos, cómo el calentamiento global ya provoca víctimas, enfermedades y perjuicios económicos en todo Brasil
De autoría de la organización ambientalista Greenpeace, la obra muestra casos como la imagen de las Cataratas del Iguazú, en el sur de Brasil, con cascadas menguadas o completamente secas. La disminución del volumen de agua, que llegó a un décimo de lo normal durante julio, fue provocada por una de las peores sequías de los últimos años en el Estado de Paraná. El año pasado, la Amazonia, que detenta el 20% del agua dulce del planeta, se transformó en una especie de semiárido, en una de las sequías más severas que hayan asolado la región.
Además en 2005, un tornado devastó el municipio de Muitos Capões, Río Grande do Sul, el mismo día en que el huracán Katrina arrasó con Nueva Orleans, en Estados Unidos. A fines de marzo de 2004, el huracán Catarina, el primero registrado en el Atlántico Sul, mató a 11 personas y produjo destrucción en decenas de municipios de la región Sur. Solamente en Santa Catarina dañó a más de 32 mil casas, con perjuicios de más de R$ 1.000 millones.
Según Greenpeace, las declaraciones de los investigadores Carlos Nobre, del Inpe (Instituto Nacional de Pesquisas Espaciales), y Francisco Aquino, de la UFRGS (Universidad Federal de Río Grande do Sul) revelan que esas son evidencias claras de que el mundo y varias regiones de Brasil son vulnerables a los impactos de los cambios climáticos provocados por el calentamiento global.
El documental y el informe "Cambios del Clima, Cambios de Vidas" presentan además testimonios de víctimas del calentamiento global en la Amazonia, en el Nordeste, en el Sur y en la zona litoral brasilera. Son personas que vieron sus casas destruidas a causa de vientos o inundaciones, perdieron sus cultivos y sus animales por causa de sequías fuera de lo normal o fueron afectadas por catástrofes climáticas antes desconocidas por los brasileros. Muestran también las relaciones entre la destrucción de la mayor floresta tropical del mundo, la Amazonia, y el calentamiento global, y cómo la deforestación y las quemazones hacen de Brasil el cuarto mayor emisor de gas carbónico del planeta.
"Brasil necesita asumir su responsabilidad como gran emisor de gases de efecto invernadero. El gobierno debe combatir la deforestación de manera implacable, promover las energías limpias y los programas de economía de energía. Los brasileros tienen todo el derecho de saber dónde somos más vulnerables a los efectos devastadores del calentamiento global y cómo vamos a reducir nuestra contribución en la generación de este problema. No tenemos tiempo que perder en esta lucha por la supervivencia", afirma Carlos Rittl, coordinador de la campaña de clima de Greenpeace.
El informe y el documental muestran también lo que los gobiernos, las industrias y los ciudadanos pueden hacer, mediante cambios en los patrones de producción y de consumo, para evitar que el escenario de cambios climáticos, que ya es grave, se torne irreversible y catastrófico para toda la vida sobre el planeta en los próximos años.
Además del informe y del video, la nueva campaña de cambios climáticos de Greenpeace cuenta con eventos de movilización pública: la exposición fotográfica y la instalación sensorial "Cambios del Clima, Cambios de Vidas" recorrerán 10 ciudades brasileras. La exposición posee 28 paneles con fotos y textos explicativos sobre cómo el calentamiento global ya afecta la vida de miles de brasileros. Los visitantes también podrán conocer un túnel para visualizar y sentir los efectos de los cambios climáticos. Al final de la visita, las personas recibirán una cartilla con recomendaciones de lo que pueden hacer para ayudar a restaurar el equilibrio climático de nuestro planeta.
Traducción: moc.liamg@leinad.setnarrab