Perú

"¿No quieres que se repita la historia (el desastre) para los territorios indígenas y sus hijos? Ante tanta destrucción hay un silencio cómplice desde la comodidad urbana de Loreto y el Perú por las cuantiosas rentas petroleras que han recibido durante décadas".

Lo único que aterriza en el aeropuerto de Andoas cerca del río Pastaza, desde hace 10 días, son los sueños de ancianas, jóvenes, madres, padres, en fin, cientos de pobladores quechuas del Pastaza, que han recuperado el territorio arrebatado violentamente por el Estado y las empresas petroleras.

¿Cómo las mujeres y hombres que trabajan la tierra pueden combatir los problemas que los asechan? Con esta premisa se desarrolló en Lima el Taller Nacional para la Incidencia en Políticas Públicas organizado por la Confederación Nacional Agraria – CNA.

La política de marginación contra los agricultores peruanos, al impedirles acceder a pequeños lotes de terrenos agrícolas continúa a pasos galopantes por parte de este cuestionable gobierno, que prefiere convocar a extranjeros para adquirir lotes grandes, pese a que se trata de proyectos financiados con el dinero de todos los peruanos.

De estos 142 casos (115 activos y 27 latentes) se puede observar que 94 corresponden a conflictos relacionados a actividades mineras, 21 a hidrocarburos, 10 a energía, 5 a residuos y saneamiento, 3 a forestales, 2 a agroindustria y 7 a otras actividades.

"Insiste que no se dejará sobornar por la mina, que no venderá su predio porque no busca beneficio personal y suceda lo que suceda continuará con su causa. "Nuestra lucha no sólo es por mi familia y mi terreno, es por todas las comunidades, por la salud de las personas y para proteger a la laguna".

El Reporte de Conflictos Sociales N° 138 de la Defensoría del Pueblo, correspondiente al mes de agosto de este año, registró 213 conflictos sociales (153 activos y 60 latentes), de los cuales 142 son de carácter socioambiental.

Compartimos el editorial 4ta Cumbre de los Pueblos Afectados por la Minería Transnacional, que acompaña la edición 109 de la revista Lucha Indígena y que tiene como director a Hugo Blanco Galdós.