Argentina: Dura crítica de la Iglesia por falta de control en los desmontes
El equipo Nacional de Pastoral Aborigen (ENDEPA), que depende de la Conferencia Episcopal -organismo que agrupa a los obispos del país- consideró "un acto de necedad e irresponsabilidad política" negar que las deforestaciones alteran el equilibrio ecológico. Y advirtió que, si se persiste en esa actitud, "es de esperar que nuevas catástrofes como la de Tartagal se repitan periódicamente"
De esta manera, el ENDEPA salió a sentar posición en la controversia por el impacto de las deforestaciones en el reciente alud de Tartagal, luego de que funcionarios nacionales, provinciales y productores agropecuarios lo relativizaran. Lo hizo a través de una dura declaración a la que tituló: "¿Pudo evitarse el desastre de Tartagal?"
"Existen serios estudios que demuestran cómo los desmontes, talas irracionales, apertura de picadas para actividades petroleras y otros aprovechamientos sin los debidos estudios de impacto ambiental y control público, han alterado significativamente el equilibrio ecológico de la zona", dice la Pastoral Aborigen en el documento difundido.
En ese sentido, subraya que "no deja de sorprendernos la ligereza de los dichos de nuestras autoridades políticas, desde la presidenta Cristina Fernández de Kirchner, hasta el gobernador de Salta, Juan Manuel Urtubey, y sus funcionarios subalternos".
Luego formula varias preguntas:
"¿Puede atribuirse toda la responsabilidad a fuerzas de la naturaleza cuando desde hace años existen estudios de la Universidad Nacional de Salta, entre otros, que alertaban acerca de la posibilidad de derrumbes e inundaciones provocado por el deterioro de la cabecera de la cuenta del río Tartagal?"
"¿Puede hablarse de hechos inevitables cuando los estudios científicos y hasta el sentido común demandaban la necesidad de encarar urgentes medidas que detengan o, por lo menos, controlen las acciones del hombre?".
"¿Es posible eximir de responsabilidad a las autoridades políticas que estuvieron ausentes, que no quisieron escuchar, que no previeron, que niegan la realidad?".
Antecedentes
El 9 de febrero Tartagal fue arrasada por un alud de barro y agua que provocó un taponamiento en el río e inundó una buena parte de la ciudad salteña. La catástrofe ambiental dejó dos muertos y 2.500 personas sin casa.
A pesar de las insistencias del ministro de Medio Ambiente de Salta, Julio Nasser, que aseguró que no hubo desmontes ni tala en la cuenca media y alta del río Tartagal que generaran el aluvión, en los últimos diez años Salta perdió 1,2 millón de hectáreas de bosques nativos. Esto generó protestas de comunidades indígenas, pequeños productores y especialistas. Al gobierno provincial le quedan 30 días para reglamentar una nueva Ley de Bosques, que incluye la zonificación por usos permitidos.
La presidenta anunció la inversión de 160 millones de pesos para la zona.